miércoles, 11 de diciembre de 2013

Historia de un viejo borracho


Por: Alexiel Vidam

Como buena seguidora de Bukowski, tenía que ver Barfly (y la he visto más de una vez), esta película de Barbet Schoroeder basada en la vida y obra del “último escritor maldito norteamericano”. Curiosamente, el propio Bukowski estuvo detrás del guión, y emociona verle “colado” en unas tomas fugaces del filme; a pesar de ello, tengo sentimientos encontrados con la película…


Charles Bukowski
Charles Bukowski escribe con las tripas. Suele desatar su rabia hacia el sistema aplastante; pero no lo hace como se suele hacer, alardeando de tomar fusil, ni mostrando su lado más “solidario” al predicar la igualdad. Bukowski busca desagradar (y  a la vez agrada). Se rebela con todo su ser, con su vida misma, que luego plasma en prosa y en poemas. Es un borracho empedernido, amo y señor de los bares y de la “escoria”, amigo de prostitutas y vagabundos. Es un tipo que se niega al trabajo, que vive de favores, apuestas. Le descubrieron de viejo, después de muchos rechazos en diarios y revistas.


Bukowski de "colado" en una escena de la película.

Con todo y todo, sabe tocar. Sus personajes son pequeños monstruos con un fondo extremadamente conmovedor. En su simpleza y en su explicitez, está la paradoja de una sugerencia profunda, que remueve las fibras. Es la mezcla del horror y la ternura…

En este aspecto –el de conmover-, la adaptación de Schroeder cumple con su función.


 Nos encontramos ante un borracho llamado Chinaski (Henry Chinaski, el eterno alter-ego del escritor en casi todas sus historias), un sujeto que busca broncas en los bares aunque siempre lo golpeen (sólo porque “es valiente”). Un tipo con un gusto especial por las alcohólicas, a quienes ve como “diosas en desgracia”. Mickey Rourke, en su papel, sabe transmitir esa emoción de los personajes de Buk, y Faye Dunaway, calza perfectamente en la musa venida a menos del autor. Ella es Wanda, una mujer que se va con el primero que le ofrezca un whisky. Pero ella se deja atrapar por él –hasta cierto punto-, porque él es un cerdo con aires de nobleza; porque comparte sus malas costumbres y sabe descifrar su soledad. Ambos son seres de la calle, sin modales y sin dueños, que se celan extrañamente y a su manera.


 La película tiene frases memorables, y es que “Buk”, está ahí, escribiendo cada uno de los diálogos, y volviéndolos a escribir en nuestra cabeza a la hora de observar. Sin embargo, no siento que esté en su totalidad… tal vez por detalles que la puesta en escena pasa por alto, o porque Rourke –con todo y todo- sigue siendo demasiado “bonito”. El personaje lleva en sí el lado más tierno de Buk, le falta la parte morbosa y “demoníaca”. Bukowski es un ser de contrastes, es alguien que conmueve pero a la vez perturba, que hinca con sutileza en medio de la espeluznante sordidez. A este personaje le falta ensuciarse. Le falta un poco de mierda encima para poder ser Bukowski.

Rourke representa el lado más tierno de Bukowski.

Según algo que leí, Bukowski renegó alguna vez sobre la interpretación de Rourke, a quien consideró más parecido a Marlon Brando que a sí mismo. Creo que la idea se entiende. Con toda su decadencia, éste no deja de ser un tipo guapo y amigable; los personajes de Buk tienen sus ratos gentiles, pero también son sujetos con  los que sabes que no te quieres encontrar. Tipos que te agradan en el papel, pero que no quieres cerca, porque saben que andarían fantaseando con levantarse a tu a tu esposa, a tu madre, o hasta a tu abuela (y si eres mujer, a ti, y no de una manera agradable).

La irreverencia de Bukowski

Como película, puedo decir que Barfly es entretenida, digerible, y que tiene sus frases trascendentes (el guión sí es completamente Buk –cabe redundar, escrito por él-). La ambientación también es uno de sus puntos fuertes; las calles, personajes secundarios, y sobre todo la música, saben a Bukowski. Irónicamente, el propio Chinaski es lo que no acaba de convencer. Reafirmo mis sentimientos encontrados con el filme.



Para cerrar, les dejo algunos diálogos, y al final del post pueden encontrar la película completa y subtitulada al español.



“En este país todo el mundo tiene obligación de ser algo, es como si alguien hubiera escrito una regla que dijera que todos tienen que hacer algo, todos tienen que ser algo, yo a veces me aburro de pensar en todas las cosas que no quiero hacer, las cosas que no quiero ser.”
(Chinaski)



“- Podrías escribir en paz...
- Muñeca, nadie que escriba algo que merezca la pena puede escribir en paz.”
(La periodista y Chinaski)



“Todos estamos en un infierno, y sólo en el manicomio es donde la gente sabe que está en el infierno.”
(Wanda)



“Soy un grifo que gotea, una botella vacía, juventud apuñalada y afeitada. Palabras aprendidas, preludio de muerte.”
(Chinaski)



“- Sólo una cosa. No quiero enamorarme nunca más. No quiero pasar por eso otra vez...
- No te preocupes. Nadie se ha enamorado de mí todavía. “
(Wanda y Chinaski)


Ficha técnica:

Dirección: Barbet Schroeder
Producción: Jack Baran, Yoram Globus, Menahem Golan, Tom Luddy, Fred Roos, Barbet Schroeder
Guión: Charles Bukowski
Música: Jack Baran
Reparto: Mickey Rourke, Faye Dunaway, Alice Krige, Jack Nance, J.C. Quinn
País: Estados Unidos
Año: 1987
Género: Drama, comedia





*Nota: Verificar que en el video esté activada la opción "subtítulos".

2 comentarios:

  1. Siguiendo las frases que dejaste parece tener un buen guión y me fío bastante para ver esa película. Gracias por compartir!! Un abrazo.

    http://simplementematt.blogspot.com.ar/

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  2. Gracias a ti :)! Sí, tiene muy buen guión. Si no te la pasas buscando la medida exacta de Buk en la película, la disfrutas bastante.

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