jueves, 24 de enero de 2019

“Spider-Man: Un nuevo universo” (animado)


Por: Michelle Frydlewski

En diciembre del año pasado se estrenó una película que, a un mes de su estreno, ya estaba arrasando en la temporada de premios del 2019. Spider-Man: Un nuevo universo (título original: Spider-Man: Into the Spider-Verse).

Después de ver que superó a cintas como Isla de perros de Wes Anderson y las dos apuestas de Disney (Los Increíbles 2 y Wifi Ralph), decidí que tenía que ver yo misma cuál era la emoción… y lo valió. Una trama interesante, personajes muy bien escogidos, un reparto bastante bueno y una animación, para mí, exquisita.

Vamos por partes…


Primero: la trama. Sin entrar en spoilers, la película nos presenta a Miles Morales, un adolescente que debe adaptarse a un nuevo internado para alumnos ejemplares. Miles, contrariado, decide acudir a su tío por un consejo y, para no fregarles la primera parte de la peli, por si no saben qué pasa, termina convirtiéndose en Spider-Man. Como bien vemos en el trailer, un villano trae a múltiples versiones de Spider-Man de universos paralelos.

Personalmente, hay partes de la trama que me parecen gratuitas: conflictos que se solucionan porque deben solucionarse, puntos que se cierran sólo por cerrar. Entiendo que quisieron mantener la película ligera para mantener la clasificación de “apta para todo público”, pero el desarrollo podría haber sido más profundo y estar mejor justificado.


Algo que me molestó MUCHÍSIMO de mi experiencia con esta película nada tiene que ver con la cinta, sino de la proyección en cines: en todo Lima, había UNA sola función de la película subtitulada. UNA. De entre las más de 40 que conté.

Gracias a la sede de San Miguel por tener una función subtitulada (y bien de noche), porque el elenco está increíble en idioma original. Spider-Man Noir lleva la voz de Nicholas Cage y ese solo hecho ya debería ser suficiente. Hailee Steinfeld, Liev Schreiber y Mahershala Ali (Moonlight, The Green Book) forman parte del elenco también.

Ahora… los personajes. Spider-Ham y Spider-Man Noir son los personajes que aportan la mayor dosis de humor. Dos estilos muy distintos de humor que se complementan muy bien entre ellos.

El Spider-Man de Miles Morales es lo que uno se imaginaría de un adolescente que de un momento a otro tiene super poderes y poco a poco va aprendiendo a dominarlos (puntos extras por mostrar su aprendizaje y no siendo maestro desde el primer momento).

Y ahí nomás lo dejo para no soplar todo… no sin antes declararme hincha de Gwanda y su traje.


Lo que más me ha gustado de toda la película, definitivamente es el estilo de animación. Por unos momentos se sentía stop-motion, por otros 100% animación digital (es animación computarizada, ya lo sé, no lo pongo en duda) y otros más, parecía que estaba observando un cómic tal cual.

El hecho de usar una base tan peculiar y terminarla con una sensación de historieta crea una animación que, en primer momento, puede resultar un poco incómodo… pero después de los primeros minutos te atrapa y te fascina por esta mescolanza artística que funciona tan bien en pantalla.

Las escenas a mitad y final de los créditos -¡por dios!- no sólo nos entregan una genial secuencia de créditos iniciales, sino que nos regalan una bellísima canción navideña cantada por el mismísimo Peter Parker, y la escena post créditos más graciosa de la historia de Marvel. Es un meme, literalmente. Nunca antes había estado tan feliz de quedarme hasta el final de los créditos de alguna película.


Un Golden Globe y un Critics Choice más que merecidos. Aunque Isla de perros y Los Increíbles 2 fueron de mis películas favoritas del año pasado, entiendo perfectamente por qué este film ha arrasado hasta ahora en la temporada de premios y en la taquilla.

Definitivamente recomiendo que la vean, especialmente, en idioma original. Los que ya la vieron, ¿qué opinan? ¿Les parece digna de los premios que ha ganado? ¿Les parece un fiasco y un robo a otra película? ¡Dejen sus comentarios!


Ficha técnica

Dirección: Bob Persichetti, Peter Ramsey, Rodney Rothman
Producción: Christina Steinberg, Amy Pascal, Avi Arad, Matt Tolmach, Phil Lord
Guión: Chris Miller, Phil Lord
Idea original: Alex Hirsch, Phil Lord, Christopher Miller
Música: Daniel Pemberton
Reparto: Shameik Moore, Hailee Steinfeld, Mahershala Ali, Jake Johnson, Nicolas Cage, Liev Schreiber
País: Estados Unidos
Idioma: Inglés
Año: 2018
Género: Animación, superhéroes, aventura
Duración: 120 minutos




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miércoles, 23 de enero de 2019

“Climax”: La Danza de Babel



 Por: Carla Aguilar


Nuevamente, en una danza bajo los efectos del LCD, vemos cómo Gaspar Noé nos vuelve a esclarecer la crueldad de nuestra naturaleza humana. Clímax, según su él, está construida como una “Torre de Babel”: es una combinación alucinante de todos los conflictos internos que uno pueda tener, por lo que no termina de cobrar sentido y se convierte en una pesadilla, tanto para sus personajes como para el espectador. Un tormento que no da tregua.

Ambientada en los años 90, la película comienza con una entrevista grabada a aquellos que formarán parte de una compañía de danza; este momento pareciera ser una especie de falso documental –una manera de marcar la realidad de la ficción.

Cada personaje empieza a desnudar su personalidad. Luego, se ve a los bailarines armando una coreografía que es captada en la pantalla desde lo alto y por primerísimos primeros planos que capturan su habilidad contorsionista. Es como si te estuvieran tentando a bajar al infierno.


El espacio es una casa, un lugar cerrado; conforme avanza la película lo llegas a reconocer como un laberinto sin salida. Todos celebran con sangría –que luego revela contener ingredientes poco comunes–. Aunque no es evidente en un inicio, es inevitable estar a la espera por la catástrofe existencial que su controversial director ofrece en todo momento.

Sabes que no saldrás sano de la sala. Noé mantiene en Clímax una de sus marcas personales: experimentar con una puesta en escena que traslada a situaciones angustiantes. ¿Cómo? No se espera algo distinto de una crisis dada por un coctel de drogas, alcohol, sexo y malas intenciones: bastante típico del director. Y la parte divertida es su forma de transformarlo en cada una de sus obras, como Irreversible (2002).


La película tiene dos partes, y en todo momento mantiene su composición coreográfica que se intensifica en su proceso: pasa de ser gráfico y explícito, escenificado por sus personajes y la relación con su espacio, para convertirse en abstracto y sensorial, complementado por el juego de cámara, luces y expresiones corporales desbordantes de los personajes, sobre todo del personaje de Sofía Boutella –quien es la única actriz profesional en la película–. Te vuelves loco. Te sientes como si hubieses tomado un poco de esa sangría.



El lugar pierde su constante iluminación cuando sus personajes pierden el control y el espacio se tiñe de rojos y azules. El eje de la pantalla se pierde. Aquí explota el lado animal y autodestructivo de toda la historia; sabes que has entrado al segundo capítulo.

Estás pisando el infierno. Una manera extraordinaria de abordar el caos y cómo se expande en la humanidad. Y, en una película de Gaspar, no faltan temas como el machismo, la violencia contra la mujer, el conflicto de ser madre y ser mujer, y el constante egoísmo.


Evidentemente, bajo cualquier circunstancia, esta película sería reconocida como obra de Gaspar Noé, aunque algunos dicen que es la menos dura de todas. Aun así, se reconoce el trabajo de su autor porque sólo se puede notar la agonía por todo el espacio, más que las acciones en sí.

Su cine es radical y controversial, busca crear una reacción y poner en duda cualquier creencia. En verdad, cualquiera. Pone tu mundo de cabeza sin permiso alguno. Además, la diferencia con cualquier otra película comercial es que el rodaje fue desarrollado en 15 días –sin ensayo previo– y la mayoría de la película está compuesta por la improvisación.

Noé, así como en Irreversible, se tomó el riesgo hasta en el financiamiento de su película. No tuvo guion estructurado, ni actores profesionales. Su proyecto es una puesta en escena armada a imagen y semejanza de su propia discordia. ¿Y también de la nuestra?



Ficha técnica

Dirección: Gaspar Noé
Producción: Edouard Weil, Alice Girard, Vincent Maraval
Guión: Gaspar Noé
Protagonista: Sofia Boutella
Fotografía: Benoît Debie
Edición: Denis Bedlow, Gaspar Noé
País: Francia
Idioma: Francés, Inglés
Género: Drama, terror psicológico

“Fragmentado”: Identidad partida


Por: Nicole Giuffra

Antes de llenarlos de spoilers acerca de Fragmentado, deben saber que la secuela de esta película -titulada Glass- ya está en cartelera, de modo que este post cae a pelo con todo y link para ver la peli online al final del post (al igual que lo hicimos en nuestro post de El Protegido, primera parte de esta trilogía).

*Ahora sí, comienzan los spoilers*


El director M. Night Shyamalan hizo su reaparición en 2016 con un nuevo thriller psicológico: Fragmentado. Una historia sobre un personaje con 23 identidades a punto de ser usurpadas por la que vendría a ser la número 24: La Bestia.

Como fundador de un género distinto de thrillers psicológicos, que involucra estudios cercanos de personajes con un enfoque paranormal o sobrenatural (como fantasmas o aliens), Shyamalan es, ciertamente, un director digno de respeto. 

Sin embargo, desde el éxito de sus dos películas históricas (Sexto Sentido y El Protegido), el director tuvo muchos desaciertos como La Dama del Agua (2006), El Último Maestro del Aire (2010), Despúes de la Tierra (2013) y otros.

Por lo tanto, definitivamente Fragmentado es su mayor éxito de los últimos quince años (ahora veremos si Glass consigue superarlo).



El trastorno de identidad disociativo de la personalidad o más conocido como “personalidades múltiples” ha sido utilizado por Shyamalan para mostrar los talentos de James McAvoy. 

El actor interpreta a Kevin, un hombre que sufre de personalidades múltiples desde siempre, sus distintos alter-egos van desde lo más dulce (un Romeo de 9 años), hasta lo más aterrador (un adulto mayor con TOC que tiene una inclinación por las mujeres jóvenes).


La historia va así: dos de los alter-egos de Kevin (los más violentos), secuestran a tres adolescentes (Anya Taylor, Haley Lu Richardson y Jessica Sula) que estaban en un auto estacionado. Las jóvenes se encuentran en una especie de búnker y a partir de ahí el drama se intensifica con creciente intensidad y desconcierto.

Con el surgimiento de cada nueva personalidad, las tres jóvenes descubren, poco a poco algo, más de su secuestrador y de la prisión en que las mantiene cautivas, lo que les da una luz de esperanza. Sin embargo, una identidad significativamente más peligrosa parece tener un plan especialmente horrible para ellas.

Esta película, a pesar de ser un thriller, se libera de las convenciones del género, que usualmente tiene su efecto en los sentidos. Fragmentado tuvo todas las herramientas para trabajar el drama en un espacio que transmite claustrofobia; sin embargo, permite que su historia se realice no totalmente en el búnker, sino cambiando constantemente su punto de vista entre el secuestrador, las secuestradas y la psicóloga, interpretada por Betty Buckley.


La película es más ágil y tensa en su narrativa y ritmo de lo que hemos visto de Shyamalan últimamente. A pesar de sus casi dos horas en pantalla, parece que está en constante movimiento hacia adelante, incluso cuando nos muestra ciertos parpadeos hacia atrás para proporcionar perspectiva.

La trama y la atmósfera dan paso al estudio de cada uno de los personajes, dando pistas de que Casey (Anya Taylor) es quien tiene más probabilidades de sobrevivir, ya que intenta escapar buscando una manera de relacionarse con los alter-egos de Kevin, mientras que las otras dos chicas ponen toda su esperanza en arrastrarse por el ducto de ventilación y –¿por qué no?- en sus clases de karate de secundaria (es un misterio para mí cómo esto último no les funcionó).


Shyamalan ingeniosamente coloca a su protagonista al frente y al centro, donde McAvoy divierte y horroriza ahí donde la trama tropieza en eventuales clichés. Puede parecer extraño, pero Kevin y sus alter-egos son sorprendentemente divertidos (de repente es hora de revisar nuestra salud mental).

McAvoy usa largas pausas y leves movimientos de cejas que llegan a lograr un gran efecto, en otras ocasiones incluso la transformación en otro alter-ego se apodera de todo su cuerpo: hombros, brazos, forma de caminar y expresarse, todo cambia y la nueva personalidad toma el control total.

El actor se mueve perfectamente entre estos diferentes personajes y muestra que su rango actoral es excepcional.


El personaje de Kevin es uno genuinamente convincente. La infancia abusiva que tuvo, da lugar a una serie de identidades que buscan protegerlo de diferentes maneras. Sin embargo, estas identidades empiezan a creer que necesitan una protección extra, una nueva identidad “profética” llamada La Bestia, que está fuera de los límites humanos. 

Paralelamente, Shyamalan narra la historia igualmente traumática de Casey a través de una serie de flashblacks. En el encuentro de La Bestia y Casey, él entiende que ella tiene un pasado similar al suyo y le dice que es diferente a los demás por ello.


Ficha técnica

Dirección: M. Night Shyamalan
Producción: Marc Bienstock, M. Night Shyamalan, Jason Blum
Guión: M. Night Shyamalan
Música: West Dylan Thordson
Fotografía: Mike Gioulakis
Montaje: Luke Franco Ciarrocchi
Reparto: James McAvoy, Anya Taylor-Joy, Jessica Sula, Haley Lu Richardson, Betty Buckley
País: Estados Unidos
Idioma: Inglés
Año: 2016
Género: Terror psicológico, thriller
Duración: 116 min






*Para ver la película completa online, haz click aquí.


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lunes, 21 de enero de 2019

“El Protegido”: un superhéroe real



Por: Nicole Giuffra

En el año 2000, había pocas películas de superhéroes: X-Men recién asomaba sus narices a la pantalla grande y el taquillazo de Sam Raimi con Spiderman llegaría recién dos años más tarde. En ese entonces, pensar en súper-trajes desarmables de acero y tecnología de punta en armas (que generan explosiones equivalentes a una bomba atómica) era inconcebible. Así que, para recordar una buena película de superhéroes en la que no explote todo, te traemos una pequeña reseña de El Protegido.

*Cuidado con los spoilers, acabas de entrar a un campo minado.*



El Protegido es la primera película de lo que luego sería la trilogía del director M. Night Shyamalan (el genio detrás de Sexto Sentido). La historia relata la historia de David (Bruce Willis), un guardia de seguridad que sobrevive misteriosamente a un accidente de tren que resultó letal para el resto de los pasajeros.

Este extraño suceso llama la atención de Elijah Price/Mr. Glass (Samuel L. Jackson), quien se obsesiona con probarle su teoría a David: es un superhombre, alguien que no puede ser dañado, que no puede enfermarse, invencible. Elijah sufre de una enfermedad a los huesos que los hace increíblemente frágiles; a partir de esto, cree que existe alguien que exactamente opuesto a él; es decir, por encima del promedio.


En la época actual, en la que vemos un desarrollo creciente de las películas de superhéroes, es tentador ver similitudes básicas –a pesar de que El Protegido sea muy diferente a Marvel. Estas similitudes, son características que se repiten en todas las historias: un protagonista encubierto con una fuerza sobrehumana que se enfrenta con un villano intrigante, criminal y demente.

El personaje del héroe, un ciudadano promedio llamado David, se presenta reacio a aceptar sus poderes y usarlos para la protección cívica, para finalmente superar a su enemigo. Recibimos pistas del origen de ambos personajes en modo de flashback y ambos son interpretados por estrellas de Hollywood: un modelo de éxito de taquilla.

Contrariamente a lo que las coincidencias anteriores puedan mostrarnos, El Protegido es la antítesis exacta del estilo de Marvel y DC. En primer lugar, dura sólo un poco más de 100 minutos y su reparto no se extiende más allá de los cuatro actores centrales. Nada explota, choca o se dispara de principio a fin.

No hay gritos ni una banda sonora ensordecedora; es más, ésta es casi silenciosa en largos espacios de tiempo. La cinta está editada con un nivel de paciencia épico para lograr un realismo cotidiano, no recurre a la herramienta del CGI llamativo ni una sola vez.


En segundo lugar, se podría mencionar que el actual exceso de adaptaciones cinematográficas de cómics ha dado origen a algunas películas decentes y otras terribles, pero ninguna llega a compararse con la atmósfera de El Protegido

Las primeras, nos muestran a héroes y villanos indestructibles lanzándose unos a otros de un lado al otro de la pantalla, a través de paredes de ladrillos o cayendo de rascacielos con un par de rasguños y nada más; sin embargo, el nivel de peligro no es proporcional al de violencia, pues permanece siempre en cero.

El último encuentro en esta cinta no incluye edificios cayendo o golpes por doquier; en cambio vemos, a David derrotar a su enemigo presentándolo a las autoridades, después de un descubrimiento que lo estremece, ya que entiende la gravedad de su obsesión.


En última instancia, los personajes que hacen de villanos en los típicos filmes de superhéroes suelen usar expresiones físicas para desconcertar al público; Mr. Glass hace todo lo contrario y logra el mismo fin: su personaje es completamente no demostrativo, lo que transmite una calma perturbadora.

La escena en la que sabotea repetidamente los intentos de un empleado de sacarlo de la tienda de cómics es la demostración más efectiva de rabia no direccionada, incluso más que los extravagantes actos de terrorismo realizados por sus sucesores de pantalla.


El personaje de Elijah, a quien llaman Glass, se ve muchas veces reflejado en diferentes elementos cristalinos como pantallas de televisión o espejos. Esto puede representar una constante introspección, tomando en cuenta su constante búsqueda de una razón de ser, algo que la extrema fragilidad de su cuerpo.

Al haber pasado la mayor parte de su vida en clínicas, encuentra la respuesta leyendo cómics; éstos le presentan la dualidad de superhéroe/villano: dos opuestos que crean un equilibrio que da sentido al universo; uno de ellos en su plena individualidad no tiene valor alguno, sólo puede existir si existe el otro.

Es por este motivo que Elijah desarrolla una extraña obsesión por encontrar al héroe invencible que daría validación al personaje que él representa, el villano Mr. Glass.



Esta no es una película de superhéroes para un público infantil, y M. Night Shyamalan lo deja bastante claro en el momento en que da a Samuel L. Jackson su único momento de teatralidad: la reprensión de un cliente con la intención de comprar una ilustración edición limitada para su hijo de cuatro años. 

Elijah es un comerciante de arte de cómics, vive aislado casi de todo el mundo, amargado; habla siempre murmurando y el único momento en que se agita (de todo el film) es cuando sucede lo antes mencionado, y funciona como una buena metáfora de cómo la película quiere tratar a su público.


Por otra parte, este filme va, desde final hacia el principio, dejando pequeñas pistas. No se cuenta la historia de cómo David aprende a usar sus poderes, más bien siembra la duda de si realmente existen esos poderes en lo absoluto.

Además, se puede distinguir el énfasis en la parte humana del superhéroe; el misterio puede guiar la cinta, pero el tono es más cercano a un drama alrededor del personaje de David. Este héroe pelea con super-villanos que amenazan con destruir el mundo; se enfrenta a cosas más fáciles de reconocer: la melancolía en la que se encuentra cautivo, el creciente distanciamiento con su esposa o el fracaso como el padre que su hijo necesita.

David no solamente descubre sus nuevas habilidades, también busca a través de salvar a los demás, salvarse a sí mismo. David es un hombre roto, con una familia rota; él no es un superhéroe que vino a salvar el mundo, debe salvar su mundo primero.



El Protegido puede ser un marginado de los gigantes de taquilla de hoy, pero no existe duda alguna de que la cinta de M. Night Shyamalan es una película de superhéroes en el sentido más fiel que puede existir. Un ejemplo de esto se da cuando nos regala una imagen que se desliza suavemente por los pasillos de las tiendas de cómics e ilustraciones vintage, que muestra una genuina pasión por la forma original, la semilla del cómic en sí. ¡Un clásico imperdible!



Ficha técnica


Dirección: M. Night Shyamalan
Producción: M. Night Shyamalan, Barry Mendel, Sam Mercer
Guión: M. Night Shyamalan
Música: James Newton Howard
Fotografía: Eduardo Serra
Montaje: Dylan Tichenor
Reparto: Bruce Willis, Samuel L. Jackson, Robin Wright Penn, Spencer Treat Clark
País: Estados Unidos
Idioma: Inglés
Año: 2000
Género: Suspenso, drama, superhéroes

viernes, 11 de enero de 2019

Lo que nos dejó el 2018 – Lo mejor del año que pasó



Por: Nicole Giuffra

Aunque un poco tarde, tenía que traerles este ranking. El 2018 se pasó volando y si -como yo- nunca empezaron la dieta, la vida saludable, el libro que lleva años empolvándose en el estante o abrieron su cuenta de ahorros, felizmente el 2019 nos trae una nueva oportunidad, perfecta para que fallemos de nuevo en todo.

Este 2018, como todos los años, nos ha traído tanto muy buenas películas como desastres a gran escala, pero me concentraré en el primer aspecto -para comenzar el año con optimismo- y les presentaré una lista personal (a veces demasiado) de los mejores estrenos del 2018 en nuestro querido y desastroso país.

Vale agregar que al ser una lista “personal”, se aceptan comentarios, discrepancias y, si quieres agregar un título más a la lista, bienvenido sea. Sin más preámbulo, aquí les va:

Puesto 10: Avengers: Infinity War / Vengadores: Infinity War



  
Infinity War junta en un mismo universo a los superhéroes de Marvel enfrentando a un enemigo en común: Thanos, un genocida intergaláctico. El punto interesante es que realmente llegas a compadecer al villano, por su solitario fin y los sacrificios hechos; quien diga que no salió de la sala de cine un poco confundido con sus emociones, miente (además, luego de la descarga de adrenalina de la magnitud que nos trae el film, uno lleva las emociones a flor de piel).

Se distingue por su giro poco habitual en el argumento y un final inesperado. Los hermanos Russo presentan este experimento sin precedentes con más de un acierto. Siendo pionera en su tipo, esta película es un crossover nunca antes visto en estas dimensiones.

El resultado es un espectáculo monumentalmente atractivo, con piezas que no terminan de encajar a la perfección, pero las diferentes combinaciones de personajes y situaciones aunque puedan parecer desordenadas ha complacido a todos los fans y nos mantienen con el corazón en la garganta durante todo el film.

Puesto 9: A Quiet Place / Un lugar en Silencio


Las películas de terror son malas, tenemos que admitirlo, es muy extraño que una alcance a marcarnos; suelen ser creaciones sin inventiva y normalmente sobrecargadas de picos de emoción sin sentido. Por el contrario, A quiet place es una sorpresa muy grata, que en lugar de recurrir al típico “bu”, nos mantiene alertas en una angustia continua.

Dirigida por John Krasinski y protagonizada por él mismo y su esposa en la vida real (Emily Blunt), A uiet place nos muestra a una familia acosada por unos extraños monstruos que se guían por el sonido.

La película tiene guiños de War of the Worlds de Spielberg por la presencia de un futuro post-apocalíptico invadido por alienígenas; sin embargo, Krasinski se aleja del morbo de la sangre y destrucción que ésta y muchas otras películas de suspenso usan como elemento principal.

El director, con poca trayectoria pero evidente talento, marca la cinta con un estilo propio interesante, ahorrándose efectos visuales estrafalarios para poner atención en aspectos que acompañen a una tensión psicológica que nos hace sufrir con agrado. El temor del espectador viene de la mano del silencio insoportable, creándose un sentido de pertenencia entre film-espectador.

Puesto 8: Deadpool 2




Ryan Reynolds conquista la pantalla nuevamente con la hilarante secuela del antihéroe favorito del público. A este punto parecería que no son sus dotes actorales, sino su carisma natural el que nos hace enamorarnos una y otra vez del cínico personaje enmascarado que protagoniza esta film de comedia no apta para menores de edad.

Con tantas películas de superhéroes que llenan la cartelera de Hollywood, necesitamos un escape, alguien que nos acompañe a burlarnos de estos personajes que no tienen nada más importante en su vida que salvar al mundo. Deadpool da un aire conocido, más humano, con el que podemos empatizar. 

La belleza de la cinta es que –a diferencia de los forzados intentos de la mayoría- no pretende ser políticamente correcta, no le interesa quedar bien o no pisar en falso: Deadpool 2 es increíblemente atrevida, irrespetuosa y no tiene miedo de cruzar los límites (cosa que deja bien en claro cada vez que el personaje rompe la cuarta pared para dirigirse al público).

La conexión que se crea con el público es inigualable, con gags que te hacen soltar carcajadas y continuas referencias a la cultura pop que la hacen un imprescindible del 2018. Cierto, queda prohibido perderse las escenas post-créditos.

Puesto 7: Bohemian Rhapsody / Bohemian Rhapsody: La historia de Freddy Mercury




Esta cinta tuvo muchos baches en su realización y se llegó a poner en duda si llegaría a tener éxito (tanto así que nos tomó por sorpresa, arrasando todo a su paso y dando a conocer a nuevas generaciones que existe música más allá de la de Maluma).

La biopic de Freddie Mercury, líder de Queen, tuvo una enorme acogida por parte de los fans y no tan fans, volviéndose un fenómeno cultural que llevó a la canción Bohemian Rhapsody a los primeros puestos de Spotify (ahora esa lista tiene un poco más de sentido y ya no preocupa tanto el futuro de la humanidad).

El concepto de nostalgia es tal vez lo que pone a esta película cerca de nuestros corazones, pero, definitivamente no lo habría podido hacer sin la extraordinaria performance de Rami Malek, quien logra meterse en la piel del personaje tanto a nivel de mostrar una energía casi abrumadora, al mismo tiempo que una vulnerabilidad propia de un ser humano que carga en los hombros su propia leyenda.

Rami Malek encarna a un Freddie Mercury que vive en una constante lucha por encontrar su lugar en el mundo, identificarse en un espacio que tenga sentido para él, esto lo busca en el amor de Mary, el éxito que tiene como banda, su familia y por último las libertades sexuales que encuentra en la cultura LGTB.

Puesto 6: Isle of Dogs / Isla de perros




Es posible que Wes Anderson lleve al límite de la obsesión el cuidado de los elementos estéticos en cada una de sus películas y esto se ve en los resultados: Isla de perros no es la excepción.

El director usa todas las herramientas a su alcance para llevar el stop-motion a otro nivel, y lo logra majestuosamente: hasta los pequeños gestos de nuestros nuevos amigos peludos son una obra de arte, sin mencionar la exquisita puesta en escena, de una precisión casi matemática.

En mi opinión, la cinta no recibió la atención que su calidad merecía, tanto por la historia como por los detalles que la transforman en un deleite visual (dirección de arte y fotografía de 10 puntos).

Isla de perros se desenvuelve en un futuro distópico en que los perros deben ser separados de los humanos y mandados a una isla, por un virus del que son portadores. 

Atari, un niño muy cercano a su mascota, va en rescate de su compañero perruno. Wes Anderson exprime lo mejor de la cultura asiática para crear lenguajes nuevos y poco conocidos a la vista, que funcionan –como muy pocas películas animadas- para un público adulto y más exigente.

Puesto 5: A Star is Born / Nace una Estrella




Recuerdo que Lady Gaga contaba en un par de entrevistas que su sueño siempre fue ser actriz antes que cantante, y me  sorprende la extraña precisión del título de la película con la magnífica interpretación que da en su primera incursión en el cine, dejando, tanto al público como a críticos, con la boca abierta.

Ha nacido una estrella cuenta cómo Ally (una Lady Gaga genuina, lejos de los kilos de maquillaje y las capas de vestuario que la hicieron un ícono de la cultura pop) llega a Hollywood, decidida a explotar su talento como cantante. Es ahí que conoce a Jackson (Bradley Cooper), una ex estrella que ha caído en diferentes vicios, que ve en ella un proyecto esperanzador.

Para un remake no está nada mal, pero en realidad aquello que nos hace seguir con ilusión esta historia es la intensa química entre los personajes principales –aunque a veces se abuse de las escenas románticas- y la credibilidad de Gaga como una chica sencilla dando sus primeros pasos a la fama.

Con esta cinta, la artista ha dejado muy en claro que detrás de toda la extravagancia con la que la identificamos en su “personaje” de cantante, existe un ser humano sensible y genuinamente talentoso.

Puesto 4: Lady Bird




Lady Bird es una película dirigida por Greta Gerwig sobre Greta Gerwig. Incursionar por primera vez en la pantalla grande como directora con una película de rasgos visiblemente autobiográficos suena bastante arriesgado, pero quizás es el elemento de catarsis personal aquello que le da originalidad a la cinta. Gerwig desarrolla humor y sensibilidad en la conflictiva relación entre una madre y su hija adolescente.

Christine (Saoirse Ronan), autoidentificada con el nombre de Lady Bird, lucha contra su fiera, sobreprotectoramente amorosa, y crítica madre. La cinta, ubicada en Sacramento en el 2002, es una mirada sensible y realista a las relaciones que nos moldean, las creencias que nos definen y la incomparable calidez que nos da el lugar que llamamos hogar.

Lady Bird representa a la incoherencia y contradicciones que dictan el camino de los adolescentes, entre una confianza increíble e inseguridades potentes; rebelde pero crítica hacia los demás, la protagonista nos muestra la dificultad que se presenta al momento de madurar y tratar de ser la mejor versión de uno mismo.

Puesto 3: Three Billboards Outside Ebbing, Missouri / Tres anuncios por un crimen




Dirigida por Martin McDonagh, Tres anuncios en las afueras relata la historia de Mildred Hayes (Frances McDormand), una madre que se enfrenta a la policía del pueblo donde vive, por no mostrar intenciones de resolver el caso de su hija, violada y asesinada. A pesar de ser una historia desgarradora, tiene rasgos de comedia negra ingeniosamente elaborada, que crea un equilibrio entre el drama y el humor.

Esta cinta es de esas que te enganchan desde el primer instante y no deja de sorprenderte a lo largo de la trama. Presenta un guión memorable y una interpretación de McDormand que es de verdad insuperable (no fue la ganadora del Óscar a mejor actriz por nada).

Por el tema se podría decir que es un thriller o drama, pero la cinta tiene muchos matices, con un estilo western que le da un toque original y -aunque la protagonista sea la madre en búsqueda de justicia- los personajes que la rodean resultan igualmente ingeniosos e intensos en su actuar y expresarse.

Martin McDonagh utiliza la violencia y el morbo para captar la atención del público, con escenas fuertes que representan la inevitable locura grotesca del ser humano, pero sin perder su talento como guionista y director, creando personajes y diálogos inolvidables.

Puesto 2: The Shape of Water / La Forma del Agua




Dramas históricos y personajes mitológicos o fantásticos, dos conceptos difíciles de alinear; sin embargo, no hay nadie que pueda sacarlo adelante mejor que Guillermo del Toro. Desde el Laberinto del Fauno lo tuvimos bajo mira y no nos defraudó con esta cinta donde un nuevo personaje femenino se enfrenta a todo y a todos para defender lo que cree justo; una Elisa (Sally Hawkins) que no tiene miedo de enfrentar al hombre que representa al “dictador” en su sistema. 

Podemos ver una estructura de personajes que se repiten, pero con elementos novedosos que envolverían a cualquiera en la magia de esta historia.

Del Toro, con su increíble talento, nos llega a convencer incluso de que una trabajadora de limpieza muda con tendencias zoofílicas, puede ser la perfecta protagonista de una historia de amor inolvidable.

Ganadora del Óscar a mejor película, esta cinta nos comparte su magia y nos deja ser parte de ella, con escenas bajo el agua que nos quitan el aliento y una narrativa que nos deja gozar más de una historia.

Puesto 1: Call Me by your Name / Llámame por tu nombre




Suave, intensa y simplemente deliciosa. La cinta de Luca Guadagnino nos traslada a la Italia de los ochenta, a un verano apasionante en el descubrimiento sexual de Elio (Timothée Chalamet). Call me by your name tiene una premisa simple: Elio pasa el verano en el norte de Italia con su familia; su padre invita a casa a un universitario que está culminando su doctorado en las culturas griega y romana, y por supuesto, se enamoran.

No es la historia lo que despierta tus sentidos, sino un guión sumamente pensado en transformar la cinta en un viaje personal e íntimo con uno mismo; tanto así que el final te deja destrozado… pero no te arrepientes de nada.

Una mirada a un amor real, al fluir de la sexualidad sin normas o juicios: tal vez lo más cercano a la naturaleza misma del ser humano. Es por esto que la incertidumbre que Guadagnino crea antes del primer encuentro de Elio y Oliver nos lleva a sentir una desesperación insoportable y casi física de que el deseo se concrete en algo carnal; sentimiento que crea una reminiscencia propia a los momentos más desesperantes de la vida.


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lunes, 7 de enero de 2019

Las 10 del 2018



Por: Michelle Frydlewski

Se nos fue otro año, y como cualquier en otro, el mundo del cine estuvo lleno de aciertos y desaciertos. Hubo películas que generaron mucha expectativa y la cumplieron; otras, no. Algunas no generaron nada antes de su estreno, pero la crítica las alabó desde su lanzamiento. Hoy les voy a comentar cuáles fueron las películas que más disfruté durante este 2018.

Puesto 10: The Incredibles 2 / Los Increíbles 2



Como toda persona que nació en los 90’s, tenía unas ganas locas, súper locas, incontrolables de ver una secuela de la película de Brad Bird y Disney. Imposible no querer una secuela cuando te dejan a punto de iniciar una pelea de superhéroes, particularmente si es de una familia de súpers.

Los Increíbles 2 satisface a todas las audiencias, tanto a niños como a los adultos que esperábamos este estreno. Una trama que se centra en Elastigirl y envía un fuerte mensaje. Un villano muy humano, con muchas facetas. Un peliculón, por lo menos para mí.

Puesto 9: Isle of Dogs / Isla de Perros




Wes Anderson decidió traernos otra joya animada al mismo estilo de Fantastic Mr. Fox, pero esta vez toca fibras más sensibles: se trata de perros, perros que alguna vez fueron mascotas. En un futuro distópico, no tan lejano, Japón tiene un problema de sobrepoblación canina y esto lleva a una epidemia de influenza canina para la que aún no hay cura.

Así, el autoritario alcalde de una ciudad decide exiliar a todos los perros de su ciudad a una isla de basura. Un niño, decidido a recuperar a su mascota, incursiona en esta isla.

Con una animación que llega por momentos al uncanny valley (animación que es muy realista pero no deja de ser percibida como animación, lo cual genera incomodidad), es una cinta que vale la pena ver; incluso cuenta con las voces de Edward Norton, Bryan Cranston y Frances McDormand, entre otros. Muy recomendada.

Puesto 8: Fantastic Beasts: The Crimes of Grindelwald / Los Crímenes de Grindelwald




Desde que vi Harry Potter y la Piedra Filosofal por primera vez, supe que ese sería un universo cinematográfico que nunca dejaría de gustarme. De hecho, incluso me rehusé a ver la última película de Harry Potter durante años, porque cuando lo hiciera, terminaría con la saga cinematográfica… pero Warner Studios y J.K. Rowling decidieron regalarnos algo mágico (ba-dum-tss!!): una nueva saga de películas, centrada en Newt Scamander, experto en bestias (y cuyo libro muchos leímos u hojeamos de niños: Bestias Fantásticas y Dónde Encontrarlas).

En el 2016, nos dieron la primera entrega, y este año nos volvieron a entregar a Eddie Redmayne en un personaje muy querido (¡y por fin nos dieron a Dumbledore joven!). Puede que esta  película no le haya parecido espectacular a nadie que no le tenga camote; a mí me encantó.

Me hizo reír, me hizo nudos en la garganta y me dejó con muchas preguntas que, supongo, responderán en la próxima entrega.

Puesto 7: Black Panther / Pantera Negra




Hasta hace poco, no me gustaban las películas de superhéroes (ni Marvel ni DC). Conforme fueron desarrollando el MCU (universo cinematográfico de Marvel), se fue desarrollando un universo en el que podría interesarme, y finalmente lo hice.

Black Panther, esperada por muchos, es la primera película que presenta un superhéroe de origen afroamericano, algo que muchos creían poco probable hasta antes de que confirmaran la producción de esta cinta.

Una película llena de acción y de personajes fuertes (tanto hombres como mujeres) que resulta un placer de ver.

Puesto 6: Bohemian Rhapsody / Bohemian Rhapsody: La historia de Freddy Mercury




La película que varios esperaron todo el año, e incluso desde antes: el biopic de Freddy Mercury/Queen. La actuación y caracterización de Rami Malek son sencillamente BRILLANTES. Un soundtrack de lujo (gracias, Queen) y una historia real (adornada, pero real). Definitivamente vale la pena verla, en especial para disfrutar de la música.

Puesto 5: Annihilation / Aniquilación




Esta cinta mezcla ciencia ficción y horror, dos géneros que, por lo menos para mí, suelen traer más decepciones que alegrías. Este año apareció Annihilation y me calló. Desde un elenco que cuenta con figuras como Natalie Portman y Gina Rodriguez, hasta una fotografía impecable y un ritmo genial, Alex Garland se luce con esta cinta, basada en la novela homónima de Jeff VanderMeer.

Si disfrutas del horror, de la ciencia ficción o de ambos, esta es una cinta del 2018 que no puedes dejar pasar: un grupo de militares entra en una zona en cuarentena, en la que todo -paisaje y criaturas- ha mutado.

Puesto 4: Avengers: Infinity War / Vengadores: Infinity War




Si Black Panther estaba en esta lista, no podía faltar Infinity War, la película más ambiciosa de Marvel hasta la fecha. Casi todos los superhéroes que ya conocíamos de este universo cinematográfico aparecen en esta cinta para evitar que Thanos –un ser que tiene como propósito destruir el 50% de la vida en el universo-, logre su cometido.

Con una película que no te deja descansar ni por dos minutos consecutivos -llena de subtramas- definitivamente Marvel logró lo que quería. Yo no puedo esperar al estreno de Endgame, ¿y ustedes?

Puesto 3: Roma




Ah, otra vez Cuarón haciendo de las suyas. El guión de Roma es muy sencillo, tanto así que un director promedio no hubiese conseguido que le financien el proyecto, pero estamos hablando de Alfonso Cuarón.

Un director de este calibre puede sacar adelante cualquier guión, y eso es lo que hace con Roma: nos cuenta una historia muy familiar, particularmente en una Latinoamérica conservadora y que guarda características colonialistas.

Roma busca mantenernos como observadores silenciosos mientras vemos parte de la vida de Cleo, una empleada doméstica. Reímos con ella, nos apasionamos con ella, nos asustamos con ella pero, sobre todo, oímos esa voz que tanto tiempo ha estado en silencio.

También se usa el blanco y negro, que nos regresa a la época de oro del cine mexicano. No será perfecta y se podrá criticar cierto tufillo paternalista, pero a pesar de todo, Cuarón nos vuelve a traer una película de primer nivel.

Puesto 2: A Star is Born / Nace una Estrella




El debut como director de Bradley Cooper y el debut el pantalla grande de Lady Gaga no pasaron desapercibidos. Este drama cumple con los requisitos para arrasar con los Oscars: actuaciones casi perfectas, un soundtrack de maravilla (sigo escuchando Shallow todos los días), una historia cautivadora, un ritmo interesante, personajes complejos.

Bradley Cooper se luce tanto en la actuación como en la dirección, y esto último nos permite ver a una Gaga que brilla por su vulnerabilidad, por su simpleza, lejos de todo lo estrafalario con lo que normalmente la asociamos. Una historia que a mí me hizo llorar y a buena parte de mis conocidos también.

De lo mejor que he visto en varios años, personalmente. 100%, 120% recomendada para todo el mundo.

Puesto 1: Hereditary / El Legado del Diablo




Acá me arrodillo. Me arrodillo sin pensarlo ante Ari Aster y Hereditary. Es, sin ninguna duda, la mejor película de terror del año. Un uso ejemplar del terror psicológico. Esta cinta explora la temática de los problemas mentales y de aquellas cosas de las que no podemos huir (como nuestro pasado y nuestro origen), y resulta en un filme que te pone los pelos de punta de principio a fin.

El terror psicológico es mi género favorito por sobre todas las cosas, y pocas veces encuentro algo que me resulte tan atractivo y que me motive a verlo una y otra vez. Si te gusta este género, hazme un favor, hazte un favor y busca esta película si es que no la has visto ya. No te vas a decepcionar.

Bonus Track: películas que por poco no llegaron a estar en mi top 10, para no perder la costumbre.


Shoplifters / Un asunto de Familia




Esta cinta japonesa es un drama brutal, que te parte el corazón y te hace correr por una caja de Kleenex. Merecidísimo su lugar entre los 9 finalistas de la categoría Película de Habla No Inglesa para los Oscars 2019. La historia va sobre una familia de muy bajos recursos que se gana la vida realizando pequeños hurtos.

A pesar de su situación, adoptan a una niña abandonada y logran sobrevivir y ser felices por una temporada… hasta que un accidente imprevisto pone sobre la mesa secretos ocultos que ponen a prueba los lazos que los unen.

Bird Box / Bird Box: A Ciegas




La mayoría ya conoce de esta película por la cantidad de memes que ha generado, pero no tantos comentan sobre la brillante actuación de Sandra Bullock y de la gran alegoría que es la película (al mejor estilo Babadook).

La historia va sobre una madre que navegan río abajo con los ojos vendados para llegar a un refugio luego de que un ente sobrenatural provocase suicidios masivos en el mundo. No vayan a verla pensando que será la mejor cinta de sus vidas, pero definitivamente, es una película que vale la pena.

Black Mirror: Bandersnatch / Bandersnatch




En cuanto a la trama, Bandersnatch no tiene nada de especial. Lo que consigue que mencione esta película es el estilo interactivo, el concepto de que elijamos nuestra propia aventura.

No voy a decir más, solo que se apoya mucho en el metalenguaje (lenguaje que se refiere a otro lenguaje –como cuando los personajes de una película hablan de cine-) y da para pasarse horas frente a la pantalla si es que quieren ver todos los finales (que, según dicen, ya no son 5; se ha descubierto uno más).

A ver si esto impulsa a más productores a ir por este camino, es una posibilidad muy interesante que deberíamos explorar.


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