sábado, 1 de octubre de 2022

“Hocus Pocus 2”: Todo lo bueno de “Hocus Pocus 1”, ¡y más!


Por: Alexiel Vidam

Cuando se trata de segundas partes, especialmente si llegan después de tanto, a veces nos da un poquito de miedo. Y es que, seamos sinceros, Disney ha metido la pata más de una vez intentando jugar a la nostalgia: los live action de El Rey León, Mulán y Pinocho han sido algunos de sus desaciertos. Así que, cuando se anunció una segunda parte de Hocus Pocus, la reacción natural de esta humilde servidora, fue una mezcla de sentimientos opuestos.

Pues bien, comencé a ver Hocus Pocus 2 al menos con el nerviosismo de que no llegue a ser la sombra de la primera.  Debo decir, que mi sorpresa fue grande y positiva, pues me topé no sólo con un digno homenaje, sino también, con una muy bien lograda secuela.

La película cuenta con una estructura similar a la de su precursora. Inicia con un flashback que nos traslada a Salem en la época en que las brujas eran perseguidas. Luego damos un gran salto hacia la época actual donde conocemos a Becca (Whitney Peak), Izzy (Belissa Escobedo) y Cassie (Lilia Buckingham), tres adolescentes aficionadas a la hechicería. Durante un ritual de cumpleaños, Becca enciende una vela sin saber que ésta contiene una mecha negra, y termina invocando, accidentalmente, a las hermanas Sanderson.

Esta vez las brujas han aprendido de sus tropiezos en el pasado, así que deciden dejar de lado su viejo brebaje de almas, e ir de lleno en la elaboración del Magicae Máxima, el hechizo que las volverá todopoderosas y completamente invulnerables. Becca y sus amigas tendrán que evitarlo.

Al igual que su predecesora, la trama de Hocus Pocus 2 no entra en grandes pretensiones. Lo que busca es engancharnos con el encanto de sus personajes y arrancarnos carcajadas con situaciones divertidas. El mérito principal del guion está en saber combinar el espíritu noventero con las fórmulas más actuales, logrando un equilibrio perfecto. Hocus Pocus 2 recurre de cuando en cuando a algún flashback o guiño que despierta el filin de la primera película; sin embargo, añade la necesaria dosis de originalidad, presentando un conflicto completamente nuevo y perfiles protagónicos distintos a los de la primera entrega.

 La premisa central de la historia, es el vínculo de hermandad. Para reforzar esta premisa, el guion rescata un elemento clave de la mitología de las brujas: el aquelarre (el “clan” de brujas). Las brujas necesitan de su aquelarre para hacerse más fuertes y asegurar su supervivencia. Esta información es introducida a través del discurso de un nuevo personaje a quien se identifica como “Madre” (Hannah Waddingham), una bruja desconocida que le regala el libro de hechizos a Winifred Sanderson cuando ésta cumple 16 años.

En este punto vale decir que la película aprovecha el flashback inicial para explorar el background de las hermanas Sanderson y cómo descubrieron su potencial de brujas a muy temprana edad. Esta introducción no sólo es interesante porque profundiza en la biografía de las antagonistas; además, nos presenta una brillante interpretación por parte de las tres niñas que interpretan a las jóvenes Winnie (Taylor Henderson), Mary (Nina Kitchen) y Sarah (Juju Journey Brener). Estas niñas SON la versión pequeña de Bette Midler, Kathy Najimi y Sarah Jessica Parker. Las tres están genialmente caracterizadas (punto para vestuario y maquillaje) y se nota que han observado y entrenado minuciosamente cada uno de los gestos, movimientos e incluso la entonación de voz de sus versiones adultas. Gran acierto del filme iniciar con esta jugada.

Por otra parte, nuestras tres villanas de siempre están impecables en sus papeles. De hecho, una de las cosas que más me gustaron de la película fue observar a las tres actrices sumamente cómodas en sus roles y pasándola bien. Se nota que las tres disfrutan lo que hacen, y algo que llama mucho la atención, es que, a pesar de los 29 años que han pasado entre este filme y su antecesor, las tres mantienen la esencia de sus personajes. Como punto a favor de la 2, el guion logra darle un poco más de peso a los personajes de Mary y Sarah, permitiendo que Kathy Najimi y Sarah Jessica Parker aporten más a la construcción de los mismos.

Al igual que en Hocus Pocus 1, en Hocus Pocus 2 las brujas se roban el show, opacando bastante a las protagonistas (¡es que estas brujas son demasiado carismáticas!). A pesar de ello, diría que, por la propia naturaleza de estos personajes, la nueva historia ha logrado que brillen un poco más que los protagonistas de la primera entrega. Además, el hecho de que Becca, Izzy y Cassie estén vinculadas con la magia desde el principio, las vuelve oponentes más interesantes y dignas de las hermanas Sanderson.

Personalmente, en lo que considero que Hocus Pocus 2 no consigue alcanzar a Hocus Pocus 1, es en el tema musical central. Era de esperarse que, si se buscaba mantener la esencia, la música fuese un elemento importante en esta segunda película. Se nota que la producción lo ha tomado en cuenta, pues la música de este filme está bien pensada, elaborada y colocada en las escenas; el tema central, cabe decir, está muy bien elegido. Lo que sucede es que tal vez ese I Put A Spell On You había dejado la valla demasiado alta; el nuevo tema se siente muy bien, pero queda la sensación de que I Put A Spell On You es insuperable.

A pesar de ello, debo decir que, si te gustó Hocus Pocus 1, es muy probable que Hocus Pocus 2 llene tus expectativas. Todos los elementos que te gustaron de la primera película están ahí, pero con los toques necesarios para que se mantenga la novedad y que todo no sea predecible. Prepara tu kleenex, pues hay algún giro conmovedor que puede que te sorprenda. Y no se te ocurra saltar los créditos, pues la escena posterior sugiere sorpresas a futuro.

 

Ficha técnica

Dirección: Anne Fletcher
Producción: Lynn Harris, David Kirschner, Steven Haft
Guion: Jen D'Angelo
Idea original: Mick Garris y David Kirschner
Música: John Debney
Fotografía: Elliot Davis
Reparto: Bette Midler, Sarah Jessica Parker, Kathy Najimy, Whitney Peak, Belissa Escobedo, Lilia Buckingham, Doug Jones, Tony Hale, Taylor Henderson, Nina Kitchen, Juju Journey Brener
País: Estados Unidos
Idioma: Inglés
Año: 2022
Género: Fantasía, aventura, comedia, terror, infantil
Duración: 106 minutos

 


*Esta película se encuentra disponible en Disney+.


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lunes, 12 de septiembre de 2022

Cobra Kai 5: el ciclo se va cerrando

 Por: Alexiel Vidam


*ATENCIÓN: El siguiente post contiene algunos spoilers.*


Luego de ver la temporada 5 de Cobra Kai (disponible en Netflix), puedo concluir que esta serie se encuentra en mi top de guilty pleasures. Sí, al igual que en temporadas anteriores, hay situaciones que exigen apagar el chip de la racionalidad por un momento, pero la fórmula resulta tan entretenida, que el interruptor se apaga con suma naturalidad y casi sin darnos cuenta.

La historia arranca justo donde nos dejó la temporada anterior; es decir, tras la derrota de los protagonistas en el torneo All Valley. Johnny (William Zabka) ha partido con Robby (Tanner Buchanan) hacia México en busca de Miguel (Xolo Maridueña), y Daniel (Ralph Macchio) está a punto de cerrar Miyagi-Do para centrarse en derrotar a Silver (Thomas Ian Griffith) sin exponer a los jóvenes. Samantha (Mary Mouser), por su parte, se siente frustrada y culpable por haber perdido ante Tory (Peyton List), y esta última está tratando de medir cómo moverse tras su desilusión hacia Silver y Cobra Kai. Mientras tanto, John Kreese (Martin Kove) permanece en la cárcel tras haber sido acusado de agredir brutalmente a Mantarraya (Paul Walter Hauser).

Aunque la trama central se centra en la lucha por evitar que Cobra Kai se expanda y que Silver siga corrompiendo a la juventud, como es usual, en torno a ello se desarrollan varias subtramas. Por una parte, la de Miguel y Robby y cómo van resolviendo sus problemas; luego está la de Johnny entrando en una nueva etapa de la vida que le lleva a madurar rápidamente, y, finalmente, al de Daniel intentando no perder a su familia por haberse metido de lleno en el enfrentamiento contra Silver. En segundo plano podríamos mencionar también la evolución de Tory a partir de sus interacciones con Kreese y lo que observa en el nuevo Cobra Kai de Terry Silver.

En líneas generales, diría que es una temporada que le saca muy bien el jugo a sus personajes, y que va cerrando por fin los conflictos importantes que se fueron planteando en temporadas pasadas.

Aquí observamos con más claridad que nunca el crecimiento que ha tenido Johnny, quien seguirá siendo nuestro entrañable patán favorito, pero ha logrado manejar mejor sus impulsos y hacerse cargo de sus responsabilidades. Otro personaje que muestra matices sumamente interesantes es Daniel, a quien, por primera vez derrotado, para luego emerger como el ave fénix con la ayuda de sus amigos y su familia.

Kreese, por su parte, aunque aparece poco, tiene participaciones contundentes, actuando siempre como la serpiente que es. El personaje consigue sorprendernos e incluso conmovernos al punto en que aparece la pregunta de si acaso alguien como Kreese sería capaz de redimirse. Este villano, a mi parecer, es mucho más contundente que Terry Silver, quien a ratos puede mostrarse un poco plano; por el contrario, Kreese es un antagonista que, con todo lo retorcido que puede ser, llega a mostrar matices profundos.

Por otra parte, tenemos a Chozen (Yuji Okumoto), un antiguo villano que se muestra redimido desde su primera aparición en la serie. Si este personaje ya se había ganado nuestro aprecio en la temporada 3, en esta temporada termina de robarse nuestro corazón. Chozen, representa un lado más frontal del Miyagi-Do, de modo que funciona como contrapeso para Daniel y buena dupla para Johnny, dado que tienen caracteres parecidos. Ya lo dice Dimitri en una secuencia de entrenamiento: “El sensei Toguchi es tan enigmático como el señor Larusso, pero tan rudo como el señor Lawrence”. Además, Chozen contrasta su temperamento firme con un jocoso sentido del humor que cae a pelo para aligerar la trama.

Entre los adolescentes, diría que quien destaca es Tory, mostrándonos un ángulo más reflexivo y crítico de su personalidad. Esta desencantada Tory está buscando respuestas, a la vez que se busca a sí misma y trata de comprender lo que es correcto. Además, se nos muestra también a una Tory más responsable para con sus compañeros, especialmente para Devon Lee (Oona O’Brien), a quien asume como pupila.

En cuanto a otros elementos, diría que Cobra Kai siempre se ha caracterizado por mantener el dinamismo, construido principalmente a partir de las escenas de acción y una excelente banda sonora (muy ochentera, muy al estilo Lawrence). Aunque esta temporada arranca con un ritmo más pausado (que poco a poco va tomando vuelo), nunca se siente aburrida, pues siempre tenemos la torpeza social de Johnny para entretenernos. Aparte de ello, como era de esperarse, tenemos el ingrediente nostálgico presente, esta vez con la aparición de Mike Barnes (“El chico malo del Karate”, interpretado por Sean Kanan) y Jessica Andrews (Robin Lively), el interés amoroso de Daniel en Karate Kid 3. Ambas apariciones, aunque son casi cameos, consiguen movilizar el filin del fanático de Karate Kid.

Ahora, si de aspectos negativos se trata, mencionaría una que otra situación repetitiva al inicio de la temporada (como los enfrentamientos entre “bandos” adolescentes), pero, por fortuna, éstas se van resolviendo rápidamente. También hay alguna situación algo cliché, como cuando Miguel se encuentra con su padre y aparece la típica frase de “no sé por qué, pero siento que ya nos conocemos”.

Algo que personalmente genera bastante ruido es el hecho de que, a lo largo de la serie, observemos diferentes disciplinas marciales (en el All Valley se aprecian movimientos de Tae Kwon Do, Kung Fu y Capoeira), y, sin embargo, todas sean identificadas como “Karate”. Es cierto que la serie puede tomarse ciertas licencias creativas para hacer que las escenas sean más vistosas e interesantes, pero diría que en esta última temporada se han pasado de la raya, pues constantemente se hace referencia al Tang Soo Do, un arte marcial coreano que comparte ciertas características con el Karate y el Tae Kwon Do. Esto, de alguna manera, hace sentir que, para los estadounidenses, todas las artes marciales son “Karate”, y todas las culturas asiáticas son iguales.

En fin… a pesar de lo mucho que me hace renegar este último punto, Cobra Kai sigue siendo 100% disfrutable (y adictiva), así que reitero lo que decía en las primeras líneas. A veces es necesario apagar el switch de la racionalidad, porque si se trata de entretener, vaya que esta serie lo consigue.


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lunes, 29 de agosto de 2022

“Hocus Pocus”: Algunas leyendas nunca mueren

Por: Alexiel Vidam

Hocus Pocus (1993) (Abracadabra en Latinoamérica y El retorno de las brujas en España) es una de esas películas que marcó mis años de primaria, cuando aún existía Blockbuster Video; luego se convirtió en un clásico que debía repetir cada Halloween. Hoy quiero hablarles de ella con motivo del próximo estreno de su secuela a través de la plataforma Disney+.

La historia comienza en 1693, en Salem, Estados Unidos y nos presenta a las hermanas Sanderson: Winifred (Bette Midler), Mary (Kathy Najimi) y Sarah (Sarah Jessica Parker), tres brujas obsesionadas con la belleza y la eterna juventud que, para lograr su propósito, roban la vida de los niños.

El joven Thackery Binx (Sean Murray) es testigo de cómo las brujas secuestran a su hermana Emily, e intenta rescatarla, pero es descubierto y condenado a vivir eternamente bajo la forma de un gato. Poco después de embrujar a Thackery y asesinar a Emily, las brujas son descubiertas y sentenciadas a la orca. 

No obstante, antes de morir, Winifred Sanderson llega a realizar un conjuro, que dice que ella y sus hermanas resucitarán cuando, en luna llena, en víspera del Día de Todos los Santos, alguien virgen encienda la vela de llama negra. En consecuencia, el gato Tackery Binx decidió usar su inmortalidad para vigilar la casa Sanderson y evitar que alguien cumpliera la maldición.

Luego de ello, nos trasladamos al 31 de octubre de 1993. Max Dennison (Omri Katz) es un adolescente que acaba de mudarse a Salem y se muestra incrédulo ante las historias locales de brujería. Para impresionar a Allison (Vinessa Show), una chica de su clase, Max decide colarse en la vieja casa de las hermanas Sanderson (que ha sido convertida en museo), donde acaba encendiendo la vela de flama negra. Esto trae de vuelta a las hermanas Sanderson, y ahora Max deberá detenerlas con ayuda de su hermanita Dani (Thora Birch), Allison y Binx.

El “gancho” de Hocus Pocus reside en el carisma de sus personajes y la agilidad de su trama. Las hermanas Sanderson se roban el show, a pesar de ser las villanas de la historia. Entre ellas destaca Winifred, la más inteligente y poderosa de las tres; Bette Midler se muestra sensacional e imponente. Su personaje se complementa bastante bien con las personalidades más torpes y distraídas de sus hermanas: la aduladora Mary y la coquetísima Sarah.

Los protagonistas, a decir verdad, brillan bastante menos que las antagonistas; sus personajes me resultaron algo estereotipados, con excepción del de Binx, quien resulta ser el líder y mentor del equipo a pesar de su forma gatuna. A pesar de ello, existe una buena química entre el grupo, lo cual permite que uno se ponga de su lado a lo largo de la aventura.

Sobre la historia, diría que el momento más memorable de la película es el de la fiesta de disfraces, cuando las hermanas Sanderson aprovechan las circunstancias para presentar un número musical que hechiza a los adultos para que “bailen hasta morir”. Esta escena además de ser sumamente divertida, nos permite apreciar la voz de Midler, quien inició su carrera actoral en Broadway. 

El hecho de que la historia se ambiente en Halloween, además, permite explotar en pantalla el recurso de los disfraces, y da libertad a las brujas para moverse sin ser reconocidas. Los trajes, peinados y maquillaje de éstas, por cierto, son de lo más rico a nivel visual.

Pasando a los puntos débiles, el filme parece haber descuidado ciertos detalles de continuidad (el fallo más notorio se da en el peinado de la actriz Sarah Jessica Parker, que a ratos aparece con el cabello lacio y a veces con el cabello ondulado), y dejado algunos huecos argumentales. 

Nos quedan dudas sobre por qué Binx, siendo un gato parlante, no habla en algunos momentos importantes de la historia (como cuando intenta que su padre lo reconozca). 

Tampoco queda muy claro por qué Billy (el ex novio zombie de Winnifred, interpretado por Doug Jones) en un principio sigue las órdenes de las brujas, pero luego se revela contra ellas.

A pesar de todo, nos encontramos ante una película encantadora y llena de espíritu noventero. Según la propia Bette Midler, se trata del rodaje “más divertido” de toda su carrera, sensación que se transmite desde la pantalla hacia el espectador. Hecha sin grandes pretensiones, Hocus Pocus busca desconectarnos un rato y hacernos reír, cosa que logra bastante bien y le ha ganado un lugar en el cine de culto. Veamos qué tal le va a su secuela.

 

Ficha técnica

Dirección: Kenny Ortega
Producción: Steven Haft, David Kirschner
Guion: Neil Cuthbert, Mick Garris
Idea original: Mick Garris, David Kirschner
Música: John Debney
Fotografía: Hiro Narita
Montaje: Peter E. Berger
Reparto: Bette Midler, Kathy Najimy, Sarah Jessica Parker, Omri Katz, Thora Birch, Vinessa Shaw, Sean Murray, Doug Jones
Año: 1993
País: Estados Unidos
Idioma: Inglés
Género: Fantasía, comedia, aventura, terror
Duración: 96 minutos 


*Esta película se encuentra disponible en Disney+.


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domingo, 21 de agosto de 2022

Lovely Complex: una de amor disparejo

Por: Alexiel Vidam

Después de tiempo, decidí darle una oportunidad a un anime de comedia romántica (debo admitir que este género no es de mis favoritos, ni para live actions ni para animación). Era una de esas tardes en que no provoca pensar, y me habían insistido tanto, que acabé sentándome a ver esta conmovedora historia sobre una mujer gigante que se enamora de un enano…

Bromas aparte, Lovely Complex, basada en el manga homónimo de Aya Nakahara, nos cuenta la historia de Risa Koizumi y Atsushi Otani, dos estudiantes de preparatoria cuya diferencia más visible, es su estatura. Risa mide 1.70 al principio de la serie (y luego crece dos centímetros), y Atsushi mide 1.56. Es decir, que ella sobrepasa la medida de la japonesa promedio, mientras que él es bastante bajito incluso para ser japonés. 

Esto muchas veces los hace punto de bromas de sus compañeros y profesores, lo cual genera conflicto entre ambos (él la llama “Amazona” o “gigantona”, mientras que ella lo llama “enano”). No obstante, ellos tienen más en común de lo que quieren aceptar, de modo que, poco a poco, irá surgiendo el romance.

En líneas generales, debo decir que me divertí mucho viendo la serie. La trama es bastante sencilla, pero captura la atención con la empatía que transmiten sus personajes y el ingenio con que se crean las situaciones cómicas. Aunque se trata de una historia de amor adolescente, los episodios se desarrollan de manera espontánea, sin repetir todo el tiempo los típicos clichés de este género. 

Además, el humor refresca y equilibra el tono de la trama, evitando que se torne empalagosa; diría, pues, que es un anime romántico bastante digerible para quienes no adoramos el romance.

La química entre los protagonistas está muy bien trabajada, así como la evolución de ambos, que se plasma, fundamentalmente, en la manera en que sus sentimientos se van transformando y develando. Personalmente, me hubiese gustado apreciar un poco más el desarrollo de Otani, cuyo cambio se percibe de manera algo acelerada en comparación al de Risa. 

Aunque el manga sí lo hace, el anime ha preferido centrarse totalmente en Risa, quien marca el punto de vista del relato y hace las veces de narradora. Los personajes secundarios, por su parte, sirven como elemento catalizador de la pareja central, impulsado y a veces obstaculizando accidentalmente los avances entre sus miembros.

En cuanto a la parte visual, considero que los gráficos son acordes con las distintas situaciones presentadas. Aunque predominan los rasgos finos en los personajes, no es rara la aparición de super deformeds (caricaturizaciones) para dar énfasis a las escenas disparatadas. Los colores pasteles también se encuentran presentes, como elemento típico de este tipo de anime.

Finalmente, la música también me parece un elemento a resaltar. Los openings y endings y endings, interpretados por el dúo Tegomass y la banda Hey! Say! 7, cuentan con sonidos ligeros y divertidos, y letras muy acordes con la temática adolescente. De hecho, los integrantes de estas agrupaciones cuentan con voces bastante juveniles, de modo que pegan bastante bien con el filin de la serie.


Ficha técnica

Director: Kounosuke Uda
Idea original: Aya Nakahara
Estudio: Toei Animation
Reparto: Akemi Okamura, Akira Nagata, Saori Higashi, Yasuhiko Tokuyama
Género: Comedia romántica, animación japonesa, comedia adolescente
Episodios: 24
País: Japón
Idioma: Japonés
Cadena televisiva: TBS, CBC, MBS, TUY, BS-i

miércoles, 10 de agosto de 2022

8 curiosidades sobre Groot

Por: Alexiel Vidam

Hoy en la madrugada se estrenó en nuestro país la simpática serie de cortos Yo soy Groot, protagonizada por Vin Diesel, a través de la plataforma Disney+. Por este motivo, aprovechamos para regalarte 8 datos que no conocías acerca de nuestro héroe de pocas palabras. 

Un origen no tan amigable

El personaje fue creado por Stan Lee, Jack Kirby y Dick Ayers, y tuvo su primera aparición en Tales of Astonish #13, en noviembre de 1960.  Por aquel entonces, Groot no era la criatura carismática y divertida que conocemos el día de hoy. De hecho, nació como un invasor que pretendía secuestrar humanos para la experimentación en su planeta de origen (el Planeta X). Otro dato interesante sobre él, es que en sus primeras apariciones podía articular discursos mucho más elaborados que “Yo soy Groot”.

El significado de llamarse Groot

“Groot” significa “grande” en neerlandés. Posiblemente eligieron el nombre en referencia a su estatura y capacidad para aumentar de tamaño. 

Raíces latinas

Como ya hemos mencionado anteriormente, Groot proviene, originalmente, del Planeta X, y pertenece a la especie Flora Colossus. Pero no se trata de un ejemplar cualquiera, sino el hijo del mismísimo rey, quien lo estaba entrenando antes de que Ronan eliminara a todos los de su especie (con excepción del Groot que conocemos). 

No obstante, en un universo alternativo llamado Guardianes del Infinito, escrito por Edgardo Miranda Rodríguez, Groot es de origen puertorriqueño. En esta versión se trata de un ceiba, un árbol que posee los espíritus de la población indígena taína. 

Héroe medioambiental

Baby Groot es un embajador no oficial del Día de la Tierra, pues Marvel, en conjunto con Disney Conservation Fund y Nature Conservancy, planta un árbol cada vez que el hashtag #GrootDanceBomb aparece en redes. 

Los superpoderes de Groot

Groot es resistente al fuego, puede controlar árboles y tiene un nivel intelectual de genio… aunque sólo pueda repetir su nombre. Además, puede ingerir madera, lo que le permite regenerarse y aumentar su fuerza. 

El “Yo soy Groot” más emotivo

Muchos recordarán que Groot le dedicó a Rocket un último “Yo soy Groot” antes de desintegrarse en la película Avengers: Infinity War (2018). Aunque la emotiva escena nos dio a entender que se trataba de una frase de despedida, James Gunn, director de Guardianes de la Galaxia reveló que su significado preciso es “¡Papá!”. Sí, pueden sacar su kleenex otra vez. 

Baby Groot: ¿hijo o clon?

En febrero de 2018, James Gunn confirmó que el Groot que aparece en Guardianes de la Galaxia Vol. 1 estaba muerto y que Baby Groot es su hijo. “Es un personaje diferente y no tiene los recuerdos del anterior”, declaró para SFX Magazine. Eso no evitó que el botánico James Wong se atreviese a afirmar lo contrario basándose en sus conocimientos. 

El científico señaló que, según la propagación vegetativa (una forma de reproducción de las plantas), Baby Groot sería un “clon genético perfecto del Groot grande”. También añadió que “incluso las plantas de la Tierra pueden procesar información compleja sobre el mundo que las rodea y retenerla sin necesidad de un órgano de almacenamiento central, como necesitan los animales (es decir, un cerebro). Si bebé Groot es un esqueje, es probable que conserve los recuerdos del Groot grande”. 

Vin Diesel para todos

Una de las cosas que nos suele molestar del doblaje, es que perdemos parte de la interpretación realizada por los actores originales. Sin embargo, eso no ocurre con Groot, pues Vin Diesel grabó más de mil veces la frase “Yo soy Groot” en distintos idiomas, entre ellos inglés, español, francés y mandarín. 

De modo que, incluso si ves las películas del MCU en versión latina, estarás escuchando la voz original de Groot. Ojo, esto no se aplica a la recién estrenada Yo soy Groot, que sí cuenta con un doblador para cada idioma; en ese caso, te recomendamos ver la serie en inglés, para poder escuchar la voz original.

Vin Diesel diciendo "Yo soy Groot" en diferentes idiomas.


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