sábado, 31 de mayo de 2014

Dejavú

El Regreso de los Mutantes


Por: Susana Anavitarte

Yo soy de esas personas que, si se perdió 5 minutos de la película, siente que lo que está viendo después no tiene sentido. Por circunstancias de la vida -y del terrible tráfico-, llegué a la función de X-Men: Días del Pasado Futuro, 20 minutos tarde. Sin embargo, cuando volví a verla, me di con la sorpresa de que incluso sin esos minutos perdidos, podía comprenderla mejor. Por si fuera poco, haciendo zapping en la tele me topé con ¡oh, sorpresa! ¡X-men 3: La Batalla Final! Y además ¡X-men: Primera Generación! Toda una maratón. Como resultado, hay una madeja enredada en mi mente que, por desgracia, me ha hecho dejar de lado mi corazón hincha de Marvel Comics.


Enredo de tiempos

Centinelas
El futuro, año 2023, se ha vuelto un caos para la comunidad mutante; los centinelas, robots creados por Industrias Trask, exterminan a todo ser que posea una habilidad sobrenatural. Charles Xavier (James McAvoy/Patrick Stewart) y Magneto (Michael Fassbender/Ian McKellen) deberán unirse de nuevo junto a sus fieles guerreros.  Esta vez Kitty Pride (Ellen Page) usará sus poderes para enviar la mente de Wolverine (Hugh Jackman) a su cuerpo del pasado en los años 70, para cambiar aquel suceso que Mystique (Jennifer Lawrence) provocó y desencadenó la actual matanza apocalíptica. Así, veremos, a lo largo de la trama, a los personajes de siempre, como Storm (Halle Berry) o Iceman (Shawn Ashmore), y a otros nuevos como Quicksilver (Evan Peters) o al creador de esas feroces armas destructivas, Bolivar Trask (Peter Dinklage).


Como al inicio mencioné, existe una maraña de confusión en mi cabeza. Y no porque esta película sea un fiasco; aviso público a la fanaticada marvelera: van a amar extremadamente los efectos visuales que permiten apreciar los poderes de los mutantes. En la postproducción veo que han jugado bastante con los ritmos de velocidad -un estilo bien Matrix- y que adornan las secuencias de acción de una forma más intensa. Presten atención a una pelea en especial: Quicksilver contra los policías.


Me considero una persona bastante meticulosa. Recuerdo que personajes como Spike o Beast, versión adulta, lucían muy distintos en X-men 3. El actor que interpretaba al primero era de rasgos asiáticos, mientras que en el caso del segundo, su tonalidad azul era más oscura, el cabello más caído y los ojos negros. Aunque a la larga no son detalles que van a definir el transcurso de la historia; son pequeñas cositas que para un hincha son inaceptables. La continuidad aquí ha sido vilmente manoseada. Amigos cosplayers: respiren hondo y no saquen las chairas por favor. Lamento informarles que la persona de vestuario no vio conveniente volver a confeccionar los uniformes negros con colores del bando Xavier. Es otra cuestión que tampoco afectará a la trama pero que molesta al sentimiento marvelero.

En cuestiones de guión y de historia, creo que hallo el núcleo de esta terrible bola de estambre que se ubica en mi mente y que me sigue confundiendo. Si esta entrega supone la continuación de X-Men 3 y X-Men: Primera Generación, entonces estamos más fritos que papas de Bembos en bajona. Porque se supone que Jean Grey, siendo poseída por Phoenix es quien muere en garras de Wolverine; previo a eso, Scott había sido asesinado por ella. Porque el Profesor X había muerto y al parecer revivido en el cuerpo de un hombre en coma. No sabemos en qué momento de X-Men: Días del futuro pasado, revive y aparece junto a sus Hombres X, como si no le hubiese ocurrido nada. Puede que en las historietas haya una explicación lógica, pero siendo sinceros, nadie va a darse el trabajo de ir a la bodega más cercana a buscar los comics y tratar de entender esto.

El marketing que nos vendía la idea de meter a casi todos los mutantes favoritos resultó, a mi parecer, una tremenda estafa. Warpath, Toad, Colossus, Blink y otros más solo tienen una pequeña participación y no el protagonismo equitativo esperado por el público. Sin embargo, acompañan bien y una vez más los efectos visuales permiten plasmar sus poderes tal y como los habíamos imaginado. Aquí pudimos ver más habilidades de Kitty Pride –entre nos, mi mutante favorita, o una de mis “must be”-. No sólo es capaz de traspasar el material más resistente, sino que también puede retroceder el tiempo en intervalos medianos, como por ejemplo 2 semanas atrás o un mes.



Mutaciones e interpretaciones

Para calentar los motores, les va con todo mi cariño la parte en la que hablamos -ojo, nada de rajar- de las actuaciones. Hugh Jackman siempre va a ser Wolverine, definitivamente le queda bien ese personaje. De estilo desenfadado; un tipo que no le invita su whisky a un alma desahuciada y que no tiene reparos en tirarte un puñetazo en la cara. James McAvoy me ha gustado bastante porque nos mostró la otra cara de Charles Xavier: No fue siempre el chico bueno, positivo y líder que hemos conocido. Tuvo un momento de su vida en el cual perdió las esperanzas y se echó al abandono. En esta secuela en particular, no utiliza mucho la telekinesis y le da mayor intervención a otros mutantes igual de poderosos. Michael Fassbender es uno de esos actores a los cuales ser villano le va bien; porque no solamente es hacer fechorías y canalladas. También tiene su corazoncito, a los fans más tiernos les da la chance de pensar que en algún momento Magneto dejará de lado las asperezas hacia los humanos y volverá a ser el “viejo amigo” de Charles.

Hubo una colaboración corta pero bastante divertida que me dejó deslumbrada. Mi pensamiento sobre los actores de televisión en películas ha mejorado gracias a eso, y ya espero con ansias la secuela en 2016. Evan Peters (Quicksilver), la super estrella de las 3 temporadas de la aclamada serie American Horror Story, nos muestra a un joven travieso, astuto, loco e infantil, que aparenta usar su extrema rapidez para fines mediocres como molestar a la gente o robar cosas sin que nadie se dé cuenta. Pero su interpretación nos deja sin aliento y nos hace cuestionarnos: ¿será tentado por el bando de Magneto, de los resentidos sociales o elegirá batallar por el bien junto al Profesor X? 2016, espero que nos sorprendas.

Creo que se ha descuidado mucho la esencia de algunos personajes. Kitty Pride es una jovencita sumisa, dulce y con poses femeninas casi de niña. Aquí la noté medio ahombrada y desgarbada. Ellen Page es una actriz bastante excepcional, pero siento que parte de su persona en la vida real fue plasmada en su rol de la ficción.

Ellen Page como Kitty Pride (Shadowcat)

Para aquellos que me conocen y que incluso leen mi Facebook, voy a aclarar algo. No creo que Jennifer Lawrence carezca de talento actoral; es más, si miran películas independientes en las que ella inició su carrera, se darán cuenta de que su registro naturalista es bastante agradable y convincente. Siento que el marketing, la fama, la exaltación de su belleza y otras variantes la han sobrevalorado. Concuerdo con muchos críticos en que su papel como Raven/Mystique ha sido el “más tela en la historia de los X-men”. Porque esta mujer es sensual, desinhibida, maléfica; es una adolescente descarriada, enfundada en una piel camaleónica color azul. Su performance fue muy plana, tratando de camuflar su falta de actitud, como lo exigía el personaje. Era una chica buena intentando ser mala. Muchos que salieron de la sala decían a voz en cuello “nunca igualará a Rebecca Romjin Stamos” (la Mystique de las primeras películas). Confío en que para la próxima secuela, esto cambie.

Jennifer Lawrence como Raven/Mystique

De la estrella de Juego de Tronos, Peter Dinklage, no puedo hablar mucho ya que su personaje tampoco fue recurrente. Era preciso, es decir, era el típico científico fascinado por lo extrahumano que intentaba hacer algo en bien del pueblo.

Resumamos: Es una película que entretiene, sorprende, pero que deja demasiadas incógnitas y frustra un poco a los fans. Ah, cierto. Esperen a que acaben los créditos. Hay un regalito especial de parte del director, los guionistas y todos los involucrados en que los mutantes permanezcan vivos en el cine. 

martes, 27 de mayo de 2014

El otro Planeta de los Simios

Además de ser un arte, el cine es un "filin" que nos acompaña en todo momento. Así lo demuestra el fotógrafo, José Guzmán, quien recreó su propio Planeta de los Simios mientras dictaba su clase de Técnicas del Diseño


*Si quieres aprender a tomar y retocar fotos tan alucinantes como ésta, te recomendamos inscribirte a la sección 507 de Técnicas del Diseño en la Universidad de Lima, con el profesor José Guzmán.

lunes, 26 de mayo de 2014

Cinematosis 01: Encuadrando el Encuadre


Para ti, que querías aprender más sobre cómo mirar una película.

Para ti, que querías seguirnos de cerca en los eventos cinéfilos.

Para ti, que querías vernos figureteando en las entrevistas.

… Ahora Cinematosis también en video!!

Porque muchas veces una imagen vale más que mil palabras, este nuevo programa surge para mostrarte todo aquello que no bastaba con ser leído.


Y este primer video está dedicado a aquellos que pedían un poco más de información sobre cómo apreciar el Cine.

... Esperamos que les guste ;)!



Conducción: Alexiel Vidam

Cámara y edición: Daniel Luza

domingo, 25 de mayo de 2014

¡Ya no falta nada para el cierre de Cinemafic!


Cinemafic 2014 es el primer concurso de relatos sobre cine Made in Perú, cuyo objetivo principal es fomentar la creatividad de los amantes del cine y la literatura.

El concurso cuenta con dos modalidades: A) La primera consiste en cambiar el desarrollo y/o desenlace de alguna de las películas nominadas al Oscar en la categoría Mejor Película (última premiación). B) La segunda, consite en crear un relato de ficción basado en la ceremonia de premiación del Oscar realizada en 2014 (tomando como personajes a los actores, a la presentadora, etc.). 

En un principio, se había planificado un límite de edad entre los 17 y los 35 años, pero debido a las constantes exigencias del público, se ha decidido tener mayor flexibilidad con este punto. A partir de ahora, la edad es libre. El resto de bases permanecen tal cual.

Les recordamos también que los relatos serán recibidos vía mail hasta el 8 de junio y la premiación –que contará con un pequeño espectáculo- se realizará el día 22 de julio del presente año.


Habrá diplomas y premios para los tres primeros lugares, que consisten en paquetes de libros, merchandising y otros regalos. También habrá diplomas para tres menciones honrosas. Los relatos ganadores, además, serán publicados –con una diagramación especial- y difundidos en las redes de Cinematosis y El Buen Librero. Para esto, contamos con un jurado de lujo: Sandro Ventura (El Buen Pedro, Loco Cielo de Abril), Gonzalo Benavente Secco (Rocanrol 68), Rafael Zalvidea (escritor y director de Lima 451), José Aberlardo Güich (escritor de Los Espectros Nacionales, El Misterio de la Loma Amarilla, entre otros).

Auspician: Centro Cultural de la Universidad Pacífico, Crisol, Estruendomudo, Editora Vuk, Zeta Bookstore, Revista Dedomedio, Altazor, SBS Librería Internacional,  Pamer de Chorrillos, J&Familia, Fukness, Editorial Perromuerto, Papicha Producciones, Piscosour.com, Taxi Servitorus, Alhuen Store y Clean&Clean.


Para mayor información, estar al tanto del evento en Facebook: https://www.facebook.com/events/672450932802850/?fref=ts. También pueden llamar al 964367261 (Alexiel Vidam), al 981335829 (Gianfranco Hereña), o escribir a los correos: cinematosiscronica@gmail.com o buenlibrero@gmail.com.

Descarga de aquí las bases.


Sol y Carne


Total Eclipse (1995), es la historia de la tormentosa relación entre Arthur Rimbaud y Paul Verlaine, también conocidos como “Los Poetas Malditos”.

Por: Alexiel Vidam

Arthur Rimbaud y Paul Verlaine están entre los poetas más recordados de la historia de la literatura. Se les conoce como “Poetas Malditos”, ya que alborotaron la Francia del S. XIX con sus versos punzocortantes y su estilo de vida bohemio.

Paul Verlaine y Arthur Rimbaud

Rimbaud era un adolescente. Casi un niño, en realidad, pero tenía una pluma revolucionaria y un espíritu indomable que sorprendía y escandalizaba al mismo tiempo. Siempre estuvo seguro de lo que quería decir, pero buscaba también dominar el modo preciso de transmitirlo. Fue por ello que envió una carta con sus poemas a Paul Verlaine, eminente poeta simbolista, como lo vemos en la película Total Eclipse, de Agnieszka Holland.


Leonardo Di Caprio interpreta a Rimbaud. Un joven de 16 años sumamente pobre, harto de vivir con su madre estricta, en el aburrimiento del trabajo de campo. Él viaja a París y se queda a vivir con Paul Verlaine (David Thewlis), pero pronto debe mudarse debido a que sus terribles modales espantaron al padre de Mathilde (Romane Bohringer), esposa de Verlaine.


Aun así, el contacto entre ambos escritores no sólo se mantiene, sino que se consolida en una relación de co-dependencia.

Verlaine es un tipo frustrado. Que vive de la manutención que le da su suegro debido a que no puede exponerse demasiado en público. Le persigue la ley por haber participado en la comuna. Por si fuera poco, de su joven esposa, lo único que le atrae es su belleza física. Verlaine busca llenar sus vacíos en el exceso de alcohol, lo cual le provoca ataques de ira que sólo le llevan a más depresión.


Él encuentra en Rimbaud ese espíritu juvenil que ha perdido, una nueva inspiración literaria y un parche para sus vacíos existenciales. Rimbaud, por su parte, es un tipo que busca experimentarlo todo, vivir las vidas de todos para plasmarlas en poemas. Él busca en Verlaine la experiencia que le ayude a pulirse, al mismo tiempo que añadir intensidad a su vida y -por qué no-, tener quién le mantenga.

Es así que se convierten en amantes y escapan en busca de la eternidad, pero en su camino los encuentra la miseria y sus propios demonios que, enfrentados, sólo les llevan a la destrucción.


Por este lado, podemos decir que la película explora muy bien tanto la personalidad de ambas figuras, como lo tormentosa y pasional de su relación. Observamos la brutalidad de Verlaine hacia su esposa y su pequeño hijo, y luego su patetismo al llorar y arrepentirse. Vemos también el egoísmo exacerbado de Rimbaud y su crueldad hacia Verlaine, a quien agrede y ridiculiza todo el tiempo.


El punto flaco del filme está en que deja de lado la parte más poética del asunto. Rimbaud y Verlaine eran un par de monstruos unidos, pero fueron un par de monstruos que produjeron grandes cosas a nivel artístico, especialmente en aquella temporada en que se dedicaron a matarse mutuamente. No por nada tuvieron tanta influencia en artistas posteriores.

“El poeta se hace vidente por medio de un largo, inmenso y razonado
desarreglo de todos los sentidos.” - Arthur Rimbaud

Rimbaud influyó ni más ni menos que en André Bretón, Henry Miller, Pier Paolo Pasolini, Hugo Pratt, Jim Morrison, Luis Alberto Spinetta y Bob Dylan. En su tiempo, Víctor Hugo le llamó “Shakespeare Niño”. Por su lado, Verlaine influenció en Ruben Darío, Manuel Machado, José Martí, Pablo Neruda, entre otros. Dicho sea de paso, las dos primeras estrofas de su poema Canción de Otoño, fueron la contraseña elegida por los aliados en la II Guerra Mundial para dar señal a los franceses sobre el desembarco de Normandía.

"Pon tu frente sobre mi frente, y tu mano en mi mano, y hazme todos
los juramentos que romperás mañana..." - Paul Verlaine

Sin embargo, en líneas generales, creo que el filme cumple las expectativas. Su finalidad pienso que fue la de mostrar el lado oscuro del artista; ese aspecto dionisíaco, frenético, indispensable para crear una obra intensa y apasionante. Cómo la vida del artista acaba plasmándose en su obra, y siendo incluso pieza clave de la misma.


Personalmente, he seguido muy de cerca la obra de estos dos escritores, y sé que si el artista de por sí guarda demonios, ellos los tenían a la infinita potencia. La unión de ambos tenía que producir, de todos modos, una explosión sobrenatural, una suerte de comunión satánica. Todo eso, se puede ver claramente reflejado en la cinta, sobre todo en las excelentes actuaciones de Di Caprio y Thewlis.





Ficha técnica:


Dirección: Agnieszka Holland
Producción: Jean-Pierre Ramsay-Lev, Philip HinchcliffeVictor Glynn
Guión: Christopher Hampton
Música: Jan A. P. Kaczmarek
Fotografía: Giorgos Arvanitis
Montaje: Isabelle Lorente
Reparto: Leonardo DiCaprio, David Thewlis, Romane Bohringer
Países: Reino Unido, Francia, Bélgica, Italia
Año: 1995
Género: Drama
Duración: 111 min.

Idioma: Inglés



**VÉLA TÚ MISMO**


Total Eclipse, película completa.


*Nota: El título "Vidas al Límite", que aparece en el video, es el que se le puso en España. La fecha "1871" entre paréntesis NO alude al año de la película sino a aquel en que los poetas se conocieron.

sábado, 24 de mayo de 2014

Luces, cámara...¡Acción!


¿Nos extrañaron...? No, no nos morimos, estábamos de juerg... ¡Ejem! ¡Cof, cof! Estábamos trabajando para traerles este nuevo programa en video, que se estrena este Lunes 26 de Mayo en este mismo blog.

Ahora ya no sólo nos podrán leer, sino que podrán descubrir detallitos interesantes sobre el lenguaje del Cine, ver reportajes sobre eventos cinéfilos y cinematográficos, entrevistas, y más.

¡No se lo pierdan!

viernes, 23 de mayo de 2014

Cine Debate 2014 presenta “Una Semana de Pocas Muertes”



Siguiendo con su ciclo de cine peruano independiente, Cine Debate 2014 retorna con Una Semana de Pocas Muertes, del director Farid Rodríguez.

Según el autor, la idea original surgió a raíz de una frase que escuchó: “Este fue un día con pocas muertes”. A partir de ahí, visualizó al forense esperando, sentado en el pasillo, la llegada de cadáveres a la morgue en que trabajaba.

La película no cuenta con diálogos ni personajes secundarios. Está en blanco y negro y carece de fondo musical. Es la manera personal en que el autor nos relata la espera de la muere, y cómo la llegada de ésta termina siendo necesaria.


El evento, patrocinado por Cinematosis, El Portal Producciones y Revisa Dedomedio, se dará este viernes 23 de Mayo a las 7 PM en la Ventana Indiscreta de la Universidad de Lima. El ingreso es completamente libre.

martes, 13 de mayo de 2014

Cinemafic 2014: El primer concurso de relatos sobre cine "Made in Peru"

Y aquí está... ¡El poserísimo reel de Cinemafic 2014! El primer concurso de relatos sobre cine con sabor peruano.



Descarga de aquí las bases, y haz click aquí para ingresar al evento y seguir el desarrollo del concurso.

domingo, 11 de mayo de 2014

“Mi vieja favorita”



Por: Alexiel Vidam

Si el año pasado celebramos el Día de la Madre con un post dedicado a las 5 madres del cine por las que NICA cambiarías a tu vieja, este año hemos decidido dedicarle un post a nuestras 5 viejas favoritas del cine. Sin embargo, tratándose de nosotros, se trata de unas madres bastante “particulares”.


**LA MADRE DEL “DIABLILLO”**

Rosemary Woodhouse (El Bebé de Rosmary)

Si desde chiquito tenías dotes de delincuente, Rosemary Woodhouse debe ser tu madre favorita, la que te defendería aunque fueses el propio Satán –literalmente-. Según El Bebé de Rosemary, esta mujer fue sometida –sin su consentimiento- a un rito demoníaco. Ella creyó que querían matar a su nene, y quiso defenderlo a como dé lugar… Lo que no sabía era que los miembros de dicha secta buscaban protegerlo a toda costa, porque se convertiría en el nuevo señor de las tinieblas. Si tu vieja es tipo Rosmary, podemos alucinarla como la típica madre consentidora; aunque no hubieses nacido diablo, te habría convertido en él.


**TU VIJA SAMURÁI**

Beatrix Kiddo (Kill Bill)

Todos queremos una mamá gángster experta en Kung Fu. Admítanlo, es divertido. Tal vez no sea la madre más ejemplar de todas, pero si nos hicieran algo, ella saldría “a matar por sus nenes”. Además, para tu cumpleaños seguro todos tus regalos serían espadas, cuchillos, pistolas; en lugar de ir al colegio, irías a entrenar con Pai Mei, y por las noches te leerían el bonito y educativo cuento de Jack El Destripador. Una de mis favoritas.


**LA SACRIFICADA**

Mamá Gump (Forrest Gump)

Mamá Gump nos roba el corazón a todos. Ella es la madre sacrificada y protectora, la que te da consejos y te recuerda que eres especial (aunque tu C.I. esté por debajo del promedio y confundas a una mosca con un rinoceronte). Sin duda, un tipo como Forrest no hubiese sido tan afortunado de no ser por la madre que tuvo. Ella, con sus frases sabias, supo enseñarle a su hijo a encontrar siempre el lado bueno de todo, y a estar a la espera de algún milagro… porque “la vida es una caja de bombones; nunca sabes lo que te va a tocar”.


**LA “NEW AGE”**

Morticia Addams (Los Locos Addams)

Si la llevamos al plano real, Morticia sería el tipo de vieja que te mete a un colegio tipo Los Reyes Rojos (La Caja de Cartón, Leonardo Da Vinci, etc.), para que su hijito no salga como un robot más del sistema. La que te prepara “suculentos” –y nutritivos- platos  tan malaspectosos, que hacen que el friskies del gato se vea como un manjar. La que te baña en ruda contra la mala suerte, le hace amarres a tus enamorad@s si son buen partido, y mal de ojo si no lo son. Éste es el tipo de vieja que además piensa que verte comiendo tierra en el jardín está bien porque es “parte de crecer”, y no se asustaría si tu mascota fuese una rata. Aunque no te lo creas, este tipo de madre existe, sobre todo en las nuevas generaciones (algunas de mis amigas son así… tienen unos mocosos muy divertidos: desde chiquitos andan organizando huelgas –es en serio-).


**MADRE ES MADRE**

Mamá (Mamá)


“Mamá” es el tipo de madre que te protege de todo mal, la que prácticamente está obsesionada con tu bienestar y se quitaría el pan de la boca para dártelo. Ella es, además, una madre consentidora que te canta canciones y te cuenta cuentos por las noches. El único problema con “Mamá”, es que está muerta, y al parecer ella nunca entendió que el cuco asustaba a los niños, porque con todo y su “nuevo look” de Momia Juanita decidió quedarse a cuida de su bebé. “¿Cómo? ¿Qué mi bebé está muerto?... Bueno, me robaré a estas dos mocosas de acá”. Hay quienes no renuncian al sentido maternal. 

viernes, 9 de mayo de 2014

“Tips” en tamaño familiar


Lo que no sabías sobre Godzilla



Por: Alexiel Vidam

El nuevo Godzilla llega a las salas limeñas el próximo 15 de Mayo. Por eso, hoy le rendimos homenaje al mito creado en Japón en 1954, cuya popularidad se extendió a lo largo del Globo, reviviendo constantemente en secuelas y precuelas en distintos formatos. A continuación, algunos datos curiosos que quizás no conocías sobre el legendario monstruo.


Bestia atómica

Antes de que los gringos rebautizaran al monstruo como el “Godzilla”, el lagarto nipón original se llamaba “Gojira", nombre que surge de la fusión de “gorira” (gorila) y “kujira” (ballena). Curioso, pues Godzilla recuerda más a un Tiranosaurio Rex, pero surge de las profundidades del océano. Cuenta la leyenda que el productor Tomoyuki Tanaka se basó en un accidente nuclear en las islas Marshall en el que los peces resultaron contaminados. Cuando la película se lanzó, habían pasado apenas nueve años desde el fin de la II Guerra Mundial (y desde la explosión de Hiroshima y Nagasaki), de modo que muchos japoneses imaginaban a Godzilla como el producto de las pruebas nucleares realizadas por los estadounidenses.


Gringos everywhere

En más de una ocasión hemos comentado por acá que a los gringos no les gusta que les den la contra, y aquí tenemos otro ejemplo de ello. Cuando la película original fue lanzada, el título era únicamente Gojira, pero cuando los gringos decidieron lanzarla, dos años después, cambiaron el título por Godzilla: King of The Monsters. Sin embargo, el cambio no se limitó al nombre; decidieron recortar la parte que de alguna forma los inculpaba por la tragedia de Hiroshima y Nagasaki, y añadir al personaje de Steve Martin (Raymond Burr) como narrador de la historia.


Peso pesado

Hayao Nakajima
Aquellos tiempos en que no existía el 3D, podían ser muy duros para ciertos actores… en especial, para los
 encargados de encarnar a una bestia gigante como Godzilla. El traje original del monstruo pesaba 90 kilos, y el personaje tuvo que ser interpretado por dos actores (Katsumi Tezuka y Haruo Nakajima), quienes se turnaban para no asfixiarse o morir deshidratados. Otro dato interesante es que durante una secuencia con efectos especiales en una piscina, la electricidad fluyó por error bajo el agua, y el pobre Haruo Nakajima casi es electrocutado al entrar.


De villano a héroe… y otra vez villano

Si bien Godzilla surgió como una representación de la amenaza nuclear, el personaje tuvo tanta acogida que se convirtió en franquicia. Se crearon secuelas y precuelas en distintos formatos (películas, series animadas, comics, videojuegos), en los su historia fue mutando. Generalmente se divide la filmografía de Godzilla en 3 etapas: La primera, llamada “Showa”, abarca desde su primera aparición en 1954, hasta la aparición de un Godzilla robot (“Mechagodzilla”) en 1975. En esta etapa, observamos cómo el villano Godzilla se va convirtiendo poco a poco en un defensor de Japón. En la segunda, “Heisei” (que va de 1985 a 1995), Godzilla vuelve a convertirse en enemigo, pero al mismo tiempo se enfrenta con otros monstruos (no necesariamente defendiendo a los humanos). Para la tercera etapa, “Millenium” (desde el 2000 hasta hoy), la productora Toho recuperó los derechos del personaje y propuso una reconstrucción del mito, con una mirada más adulta de las historias.


Godzilla Superstar

Cuando Godzilla empezó su “tour” por las salas extranjeras, las distribuidoras parecían algo inseguras con respecto al producto. De modo que, para comercializarlo utilizaron las más variadas y peculiares técnicas, como renombrar a Godzilla como “Frankenstein” (Alemania) o hacerlo posar con King Kong (aunque el gorila no tuviese vela en el entierro). Como “trolleada” del tiempo, hoy Godzilla es mucho más famoso que King Kong, tanto así que en 2004, por el festejo de sus 50 años, Godzilla obtuvo su estrella en el paseo de la fama de Hollywood… King Kong aún no la tiene. Por si fuera poco, otras franquicias le han hecho homenaje a Godzilla; una de las más conocidas es la de Zyuranger (o su versión gringa: Mighty Morphin Power Rangers), donde Dragonzord (el zord del Green Ranger), está inspirado el legendario monstruo.


¡Santos lagartos!


Se sabe también que una película que enfrentaba a Godzilla y a Batman estuvo a punto de crearse. Esta película iba a contar con la actuación estelar de Adam West como el Batman guatón y colorido. Desde aquí, agradecemos que este proyecto haya quedado truncado… salvo por el gusto de ver a Godzilla comerse a Batman (mismo min-pao).

jueves, 8 de mayo de 2014

Reflexiones sobre el cine peruano



Por: Alexiel Vidam

“Leí tu artículo de la cinta A los 40... ¿Por qué empiezas titubeante?  Un crítico escribe directo al grano... Si titubeas pierdes el respeto de los lectores, porque tu cimiento como redactora está por los suelos”.

Esto me lo dijo una colega a la que admiro bastante, Rosana López Cubas (de Lima en Escena). La crítica fue dura, pero acertada en gran medida. Entendí de qué iba.

Como decimos cuando nos “ampayan”, diré que: “Todo tiene una explicación”.

A los 40

No se trata de un titubeo de “disculpas”, porque en verdad no soy de la gente que pide disculpas por gusto. Quienes me conocen de cerca, sabrán que tengo el ego lo bastante elevado como para andar derrochando perdones injustificados. Se trata más bien de un sentimiento de desazón, de “sentimientos encontrados”, como señalé en mi post anterior.

Por una parte, nunca he estado de acuerdo con aquellos “críticos” que se dedican a destruir películas. Siempre he pensado que una buena crítica es constructiva. Que presenta un balance de puntos fuertes y puntos débiles,  y aporta. Pienso también que toda opinión debe estar justificada, presentar argumentos claros, y no decir simplemente que “me parece porque me parece” o “ES así porque soy YO”. Tampoco hay que dejar de lado que en toda forma de pensar influye la propia inclinación: tus intereses, tus sentimientos, todo lo que se relaciona a ti. Creo que a veces el crítico comete el error de sentirse dueño de la verdad; olvida que, con todos sus estudios académicos, cartones y demás, en su opinión, siempre habrá un poco de su propio gusto. Nadie es completa y absolutamente imparcial.

Loco Cielo de Abril

Por otra parte, siento que general es un buen momento para el cine peruano. Hacía ya buen tiempo que no se hacían tantas películas. En general, además, las películas nacionales no eran bien recibidas por el público y contaban apoyo escaso de las salas comerciales (casi siempre se les retiraba a la semana). La gente estaba cansada de los redundantes argumentos sobre terrorismo o chabacanería (“lisuras y calatas”), y también es verdad que, desde el fin de las coproducciones con España (la “buena época de Lombardi”), la calidad de los filmes tuvo un fuerte “bajón”.

Caídos del Cielo, de Francisco Lombardi.

Hoy contamos no sólo con una producción mucho más constante (y mejor recepción), sino que la variedad de temas es mucho más amplia. Está el cine de autor, como el de Claudia Llosa o Rosario García-Montero, el cine social, como el de Josué Méndez, el cine vanguardista -con destacados directores jóvenes como Fernando Montenegro-, y por supuesto, el cine de género, un fenómeno bastante reciente en nuestro país, protagonizado por las películas de Big Bang Films, Tondero Films, y los trabajos recientes de Frank Pérez Garland.

La Teta Asustada, de Claudia Llosa.

Ustedes dirán: “pero eso no significa que los trabajos sean buenos”. Es verdad, la cosa es heterogénea (hay de "lo bueno, lo malo y lo feo"), pero sigo pensando que el aumento de producción es positivo, y que la calidad suele ir de la mano a la práctica (como en todo arte). La gente tiende a olvidarlo. Muchas veces asiste al cine con la idea de encontrarle el mínimo defecto a una película, con un empeño particular que no pondría al observar una de esas “comedias gringas estúpidas” que tantas veces ocupan espacio en los multicines. Recuerdo, e este momento, las “críticas” cizañeras que recibió la película Rocanrol 68 (de Gonzalo Benavente), donde se notaba una clara intención de atacar a los actores, e incluso se habló de errores garrafales como mostrar el logotipo de la Municipalidad del Callao (logotipo que, por cierto, nunca encontré… y vaya que lo estuve buscando tras leer el post).

Rocanrol 68

Personalmente creo que es injusto el ensañamiento con el cine nacional, especialmente si tomamos en cuenta que maestros tan reconocidos como Almodóvar –director español-, empezaron también de manera rudimentaria. Recordemos que sus primeras películas fueron tachadas de “bodrios” por la crítica especializada, y hoy son consideradas de culto. La oportunidad que le dio el público, y su propia “necedad”, le llevaron a mejorar la técnica y, por ende, la calidad audiovisual de sus filmes.

Pero volviendo al punto de inicial… ser periodista y cinéfila a la vez, te crea ciertos dilemas. Tengo el afán de apoyar a la producción de películas aquí, pero mantengo el compromiso irrompible de transmitir lo que pienso (y por qué lo pienso).

La Malas Intenciones, de Rosario García-Montero.

Cuando fui a ver A los 40, lo hice con los mejores ánimos, pero la película no llenó mis expectativas, y aunque siempre cumplo con señalar los puntos buenos y malos de un filme, en esta ocasión encontré muchísimos más puntos flacos que fuertes. Esto me provocó una fuerte decepción –que puede notarse claramente en el inicio de mi post. No obstante, cabe resaltar, mi compromiso principal es con el público (y con mi propio criterio), de modo que no podía dejar ser "benevolente"… y de ahí el encabezado del post: “Apreciaciones Incómodas”.

miércoles, 7 de mayo de 2014

Apreciaciones incómodas

Sobre “A los 40”


Por: Alexiel Vidam

Sé que escribir un blog supuestamente te da libertad para hablar de lo que quieras y como lo quieras, pero eso no es del todo real. Hoy, por ejemplo, siento un poco de nerviosismo a la hora de lanzar una crítica sobre la película que está rompiendo taquilla y que, además, es peruana (sentimientos encontrados). Creo que estoy algo incómoda, como las primeras veces en que me preguntaron “qué tal Asu Mare”, y me vi obligada a responder que no me gustó. Porque, a pesar de todo, mantengo la costumbre de decir la verdad.

Pero, “a lo hecho, pecho”, como dice el refrán, y ya que elegí el oficio de bloggera, diré lo que pienso, sin piedad alguna, y sobre todo, sin ver la nacionalidad del producto. Y es que para ser imparciales no hay que dejarse ganar por el “filin”.


A los 40 -primera película de Bruno Ascenzo- me pareció una película mediocre. Que “entretiene”, pero no trasciende. Es cierto que tiene secuencias graciosas, pero tampoco morí de risa, y creo que ése era su objetivo: arrancar carcajadas. La historia, de hecho, me pareció flojísima. Entendí que el motivo de la reunión era poco recordar y poner sobre la mesa los conflictos de los personajes, pero creo que el guión no lo supo manejar. El diálogo entre Gianella Neyra y Sofía Rocha me pareció una de las partes más sosas del filme. Se veía el esfuerzo de las actrices para que sea verosímil, pero la verdad es que no sólo las líneas en sí, sino que la situación en sí era tan cliché, que resultaba acartonada. En verdad creo que no me banqué para nada el rollo de que, más de 20 años después, las jovencitas de colegio siguieran sintiendo cosas la una por la otra. En especial tomando en cuenta lo volátiles que son las emociones a esa edad. Podría haberme creído una curiosidad o atracción vigente, pero el rollo así, tan dramático, tan telenovelezco, no me lo tragué en absoluto.

Gianella Neyra

La mejor actuación fue –según yo- la de Katia Condos: natural, estaba en el papel. A pesar de que Carlos Alcántara tenga fama chistoso, creo que estoy demasiado acostumbrada a verlo haciendo las mismas caras, los mismos chistes. Sonreí un poco, pero “ahí nomás”. No me sorprendió. Sentí que estaba repitiendo su papel de Asu Mare (esa película cuyo máximo mérito es haber convocado a tanta gente –por lo mediático que es este actor- pero cuya trama en sí me pareció un larguísimo comercial de Brahma). Por el contrario, a Katia Condos, sin un papel tan exagerado, sí la noté creyéndose el conflicto de la mujer enamorada del “tipo equivocado”. Johanna San Miguel, en general, superó mis expectativas (hay que tener presente que Esto es Guerra le desfigura brutalmente la imagen). La vi bien en su papel de “tía” que vive de las apariencias. Curiosamente, la única escena en que no me convenció, fue la de la playa salvo, ésa que pretendía meterle dramatismo a la situación y se quedó a medias (creo, nuevamente, problema del guión).

Wendy Ramos, Johanna San Miguel y Sofía Rocha.

Para redondear, sentí que a la película le faltó peso. No había clímax. Esta película sigue una estructura de cine clásico: inicio-nudo-desenlace. En el nudo es donde va el clímax, el punto cumbre de la emoción, y aquí faltaba eso (tampoco es que hubiera demasiada emoción a lo largo de la trama). Ni drama marcado ni situación hilarante. Nada.

Es cierto que los recordados Pataclaun tienen ya una imagen querida por el público, pero me parece que no basta con poner “gente de la tele” en una película para que ésta sea buena. Hay que trabajar en eso mucho más, crear una situación interesante y un guión inteligente.  Y si el objetivo es hacer reír, realmente hacer reír, y que uno sienta que no había forma de no hacerlo, y que si el objetivo es conmover, uno realmente se sienta atravesado. Pero no que “me reí pero un toque” o “la sufrí pero un toque”. Asimismo, hay que cuidar con las escenas que están “de más”. Soy una persona liberal (y creo que eso el público lo sabe), pero el diálogo del “pan con hot dog” fue tan “por gusto”, que hasta sonó grosero. Supongo que es una jerga tan usada, que usarla otra vez es volverlo explícito. Cuidado con eso.

Carlos Alcántara

En fin… Me parece que éste ha sido un intento optimista de un joven actor que quiso empezar a hacer cine. Demasiado optimista, lamentablemente. Creo que la idea estaba “ahí”; eso de crear una excusa para cruzar situaciones de distintos caracteres, es válido; es una fórmula que suele funcionar, pero el tema es que para ello, las historias separadas deben manejarse con solidez. Hay que darse cuenta también de que cuando el chiste se cuenta dos veces ya no da risa, y me da la impresión de que a estas alturas el “neo cine peruano” está cayendo en el error de abusar de la fórmula.



(Lamento decir que el trailer genera expectativa, pero no pasa de ser una película "simpática".)