Ni cortos ni perezosos que fuéramos la mayoría de aquellos que contamos con un criterio y un nivel cultural medio para no darnos cuenta de que – tal y como se espera de cualquier concurso – la calidad no ha sido, en lo que muestra la trayectoria de los premios Oscar, garantía de triunfo.
Es por eso que lo que les presento ésta tarde es un puñado de razones de una no-cinéfila para no echarse a los brazos del criterio de los jurados de la Academia.
Tómense éste post como una corta, precaria, pero fuertemente arraigada en la observación y el sentido común (armas subestimadas), lluvia de ideas acerca de los “incentivos” que podría tener la industria cinematográfica hollywoodense para soplar, calladita, la llama del amor a l’art pour l’art (el arte por el arte), por amor a sí misma.
Claro, Compacto, Concreto
Con C de Cine, éstas tres características de las películas made in Hollywood determinan buena parte del corte de aquellas destinadas a hacerse acreedoras a una estatuilla.
Ubicándonos un un poco en el contexto en el que nace esta industria, no tardaremos en descubrir que… es una industria.
No se fundó con ambiciones de excelencia, sino de bolsillo; de modo que buena parte de lo que produce lleva en su fórmula componentes cuya razón de ser está en hacer el producto (palabra clave) digerible y accesible al consumidor promedio de entretenimiento.
Esto se traduce en la producción de películas de estructuras no tan complicadas, mayormente cerradas y cuyas tramas e ideas marquen una tendencia hacia lo explícito.
Así, vemos por ejemplo que película en donde el contenido simbólico o ideológico rebalse en su exposición a la trama, película que pierde… (Ejemplo: La Teta Asustada). El Secreto de sus ojos es mejor película, sí, me lo parece, pero yo soy de la "tribu urbana" que opina que Claudia Llosa ya jugaba en los premios Oscar del año pasado con desventaja.
La paja del amor al símbolo, misterio incandescente, ironías, retos intencionados para la inteligencia y la sensibilidad, detalles que todo lo callan y todo lo dicen estarán bien para Europa, Woody Allen y para Latinoamérica de vez en cuando, pero los gringos tienen su propia estética, y en ella no hay mucho lugar para nada que implique pedir al auditorio paciencia.
Hollywood S.A.
Iba diciéndoles que Hollywood es una industria, un negocio, una oportunidad comercial, una marca registrada. Como tal, tiene una reputación que cuidar. No puede ir por la vida premiando autores que cojan carne en cuanto a los temas susceptibles en EEUU por más prodigios que sean y dejen a toda la nación como una mierda.
Se puede ser crítico, sí, no se trata de decirles a ustedes mentiras, pero me parece que no demasiado, y que cuando no se interesa favorecer alguna coyuntura, siquiera se espera que el mensaje último sea: "En realidad los norteamericanos somos buenos tipos". Entonces desde las guerras en Vietnam hasta el consumo calabaza irresponsable son justificables. Pero estamos hablando del Oscar, y exijo más.
WHERE ARE WE?!
Una atmósfera y dirección de arte excesivamente lejanos a lo que espera el público masivo tampoco se llevan bien con la estética norteamericana.
¿Qué nos queda muy lejos? Paisajes rústicos, lugares no definibles ni catalogables dentro de lo conocido por occidente (cliché), ¡nada de experimentos...! Hollywood odia los experimentos porque son una inversión no segura. Se juega con la cámara, las tomas, los espacios y los diálogos lo suficiente para ser creativos y movilizar emocionalmente al espectador, PUNTO.
Drama Queen
Tip para ganar una apuesta al premio de la noche para mejor película y mejor actor/actriz: Descarta a los nominados que no sean dramas. Olvídate de las comedias, el terror, la fantasía, ciencia ficción o el Western, y de preferencia no le vayas a las películas que no traten de temas sociales o políticos. Y si de actores se trata, asegúrate de que en la película en cuestión hayan sido The Drama Queen (La Reina del Drama).
En esto me recuerda a lo que pasa con los Nobeles de Literatura (por encima de que no sean certámenes equiparables). Siempre es el género dramático el cual se espera más marque en la historia del arte en cuestión, y tenga mayor intervención en el devenir humano, y aquí sí que vemos una jodida, marcada, predestinada disposición a preferir obras con temas sociales o políticos… progresistas… no tan progresistas.
Lo primero pasa porque, en efecto estoy de acuerdo, un drama posee mayores oportunidades potenciales para apuntar de manera directa a los nudos existenciales y la condición humana, pese a que esto no niegue la existencia de impecables filmes, Western de Jhon Ford, por ejemplo, que se llevó todos los premios que podía por cualquiera de sus películas siempre y cuando no fueran de éste género.
Lo segundo por motivos prácticos: casi siempre se ha esperado y aun se espera de la labor del artista un compromiso con la sociedad. Y si no lo quiere tener por las buenas, lo tendrá por las malas. Si no pregúntenle a Jorge Luis Borges, que sigue esperando el Nobel, o a mí, que sigo enojada porque a Cortázar nunca se lo dieron por Rayuela. L’art pour l’art…? Mis ovarios.
Hollywood o la Familia Ingalls
Disneylandia, Hollywood, y cualquier otra proyecto estadounidense creado con la finalidad de ofrecer un espectáculo para los sentidos, trae bajo el brazo el clásico motivo de la pantomima de la magia e ilusión. Quiero decir que es por medio de canales como los mencionados que todos los ideales norteamericanos se materializan.
La historia de un país plagada de guerras, matanzas, codicia, luchas por el poder, maltrato, explotación y enseñanza de convencionalismos particularmente mediocres todo para mantener idiotizadas a 250 millones de personas que se espera corran toda su vida detrás de un carrito de super mercado en el nombre del éxito y la libertad, encuentra el perdón del Padre Nuestro pensando en la pureza de la juventud y del alma, el hogar, la familia, la inocencia, el amor al trabajo, el sacrificio por el prójimo (si peleas contra los malos), el heroismo, y todo lo que pase por normal para los protestantes, los cristianos, Ned Flanders y el subnormal de Michael Jackson.
¡De modo que nadie le venga a los gringos con las mariconadas de Pedro Almodóvar! Nada que enseñe que por encima de cualquier cosa en el mundo ellos son buenas personas merece un premio.
Probablemente la crítica más común que uno escuche por la calle antes y después de una ceremonia de los premios Oscar sea un: “siempre ganan los mismos…”
No quiero decir que el Oscar se subasta. Lo que creo es que Pepe Pérez, súper talentoso y esmerado el chico, no tiene mucha chance de tocar una estatuilla porque su nombre no figura en la lista de la beautiful people de Hollywood, y llegar ahí, y a cualquier lugar de fama, siempre se debe, entre otras cosas más honorables, un poco a la suerte, y otro poco a qué tan bien en el mundo de los ricos y famosos encajas.
Me deprimen los chistes de Sandra Bullock como presentadora, y el movimiento de caderas de la vendida de Shakira (¡perra!), y la modestia hipócrita de Steven Spielberg y sus lame-culos acabado el show de Beyonce, al lado de quien doy mi cabeza porque yo soy una erudita del cine.
El mejor crítico es el tiempo
Muchas de las películas premiadas por la Academia no trascendieron para nadie fuera de la mamá del director. Por eso, voltear a ver su tristemente radiante competencia deja un sinsabor en la boca (El Ciudadano Kane, El Padrino, El Gran Torino...). ¿Han escuchado hablar sobre Los mejores años de nuestras vidas (8 Oscar), Siguiendo mi camino (7 Oscar), o La loba (9 Oscar)? Yo tampoco. Ya saben por qué.
Más altos que Oscar
Parece que para ganar el Oscar tampoco es que necesites ser un directorazo. Resulta que a David Lynch, Federico Fellini, Alfred Hitchcock, Akira Kurosawa, Ridley Scott, Charles Chaplin, Quentin Tarantino, Orsson Welles y Georges Lucas - peces obesos del cine - no les fueron devueltas las atenciones recibidas por éstos sus compinches del séptimo arte, y jamás sacaron su galardón en la categoría a Mejor Director. ¿Interesado en algún día ganar un Oscar? Deja que tu guionista haga todo el trabajo.
Último tip
Desde que Michael Jackson murió de sobredosis de pastillas incapaz de sobrellevar el haber nacido negro, en Hollywood, ya no está de moda ser blanco. Gente que quería ser rica y famosa por allá en los Yunaites, vaya juntando para su cirugía en sentido inverso al cincuentón muerto, o, en su defecto, corra a buscar plaza en el papel de árbol de la siguiente película de Tim Burton, porque se ganaron, ¡el Oscar será suyo! ¡Aproveche la oferta!
*Yapa: El trailer de la película ganadora a Mejor Película
*Yapa 2: Lista completa de los ganadores éste año.
Mejor Fotografía:
"La invención de Hugo Cabret"
Robert Richardson
Mejor Dirección de arte:
"La invención de Hugo Cabret"
Dante Ferretti y Francesca Lo Schiavo
Mejor Vestuario:
"El Artista"
Mark Bridges
Mejor Maquillaje:
"La dama de hierro"
Mark Coulier y J. Roy Helland
Mejor Película Extranjera:
"A Separation" (Irán)
Mejor Actriz de Reparto:
Octavia Spencer
"Historias Cruzadas"
Mejor Edición:
"La chica del dragón tatuado"
Kirk Baxter y Angus Wall
Mejor Sonido:
"La invención de Hugo Cabret"
Tom Fleischman y John Midgley
Mejor Mezcla de Sonido:
"La invención de Hugo Cabret"
Philip Stockton y Eugene Gearty
Mejor Documental:
"Undefeated"
Mejor Película Animada:
"Rango"
Mejor Efectos Visuales:
"La invención de Hugo Cabret"
Rob Legato, Joss Williams, Ben Grossman y Alex Henning
Mejor Actor de Reparto:
Christopher Plummer
"Los Principiantes"
Mejor Banda Sonora:
"El Artista"
Ludovic Bource
Mejor Canción:
"Los muppets"
Bret McKenzie (Man or muppet)
Mejor Guión Adaptado:
"Los Descendientes"
Nat Faxon, Alexander Payne y Jim Rash
Mejor Guión:
"Medianoche en París"
Woody Allen
Mejor Cortometraje de Ficción:
"The shore"
Terry George y Oorlagh George
Mejor Cortometraje Documental:
"Saving Face"
Daniel Junge y Sharmeen Obaid-Chinoy
Mejor Cortometraje Animado:
"The fantastic flying books of Mrs. Morris Lessmore"
William Joyce y Brandon Oldenburg
Mejor Director:
Michel Hazanavicius
"El Artista"
Mejor Actor:
Jean Dujardin
"El Artista"
Mejor Actriz:
Meryl Streep
"La dama de hierro"
Mejor Película:
"El Artista"
(*Nota: Si quieres leer más posts de Kiara Lilas, te recomendamos leer su blog "Botella de Coca Cola": http://botelladecocacola.blogspot.com)
No hay comentarios:
Publicar un comentario