miércoles, 1 de mayo de 2013

Juegos mortales


Por: Alexiel Vidam

The Hunger Games (Los Juegos del Hambre) pinta, de buenas a primeras, como otra película comercial para jóvenes, con elementos fantásticos, acción, y algún drama adolecente. Debo admitir que, a simple vista, no me atrajo. Cuando vi el tráiler subestimé la película y no tuve interés por verla en la pantalla grande. Sin embargo, hace unos meses el DVD cayó en mis manos y me animé a darle una oportunidad. Me sorprendí bastante. Es sumamente entretenida (énfasis en “entretenida”); la trama te engancha de inicio a fin. Pero no sólo eso, sino que, dentro de sus cánones de blockbuster (película comercial), se lanza con varias críticas al sistema.


El circo de la sangre

Basada en el bestseller homónimo, escrito por Suzanne Collins, The Hunger Games nos traslada a un universo distópico; para ser más explícitos, a la nación de Panem, donde se mantiene la sangrienta tradición de los Juegos del Hambre. Estos “juegos”, son una suerte de competencia salvaje en la que 12 chicos y 12 chicas (uno de cada género por distrito) deben sobrevivir en un campo lleno de peligros, y luchar entre sí hasta que sólo viva uno. Así lo dicta el Capitolio, centro del gobierno totalitario de Panem, para controlar e intimidar a los distritos y evitar rebeliones. A su vez, los juegos son transmitidos por televisión y utilizados como forma de entretener fácil y cegadora.

Katniss Everdeen
La protagonista, Katniss Everdeen (Jennifer Lawrence), es una joven de 16 años que vive en la zona más pobre del Distrito 12, y que se dedica a cazar para sobrevivir y ayudar a abastecer a su madre y a su hermana menor, Prim (Willow Shields). Durante el sorteo para decidir quiénes participarán en los septuagésimo cuartos Juegos del Hambre, Prim es elegida como “tributo”, pero Katniss se opone y se ofrece como voluntaria para ocupar su lugar. Ella y Peeta Mellarc (Josh Hutcherson) –el tributo masculino- , deben viajar al Capitolio para recibir entrenamiento y conseguir auspiciadores. Estos auspiciadores serían los encargados de otorgarles objetos útiles para cuando se encuentren en peligro en la competencia. La manera de conseguirlos, es gustando al público.

Los 24 "tributos"
Durante la contienda, los Katniss y Peeta –quienes llegan a entablar amistad- no sólo se enfrentarán a peligros “naturales” (el campo es armado y manejado por computadora) y al dilema de arrancar otras vidas; el verdadero duelo será hallarse cara a cara.

Katniss y Peeta


Distopía contemporánea

Battle Royale
Como ya he señalado, comencé a ver The Hunger Games con poca o nula expectativa. Podría decir que, por lo visto en el tráiler, el argumento me recordó a una película bastante mala -a mi parecer- que vi hace años: Battle Royale (cinta nipona en la cual unos jóvenes de instituto debían participar en una contienda parecida dictada por el gobierno). Sin embargo, cuando vi The Hunger Games, casi dejé de  relacionarla con Battle Royale (salvo por la contienda) y empecé también a compararla con otras películas y novelas que me habían gustado bastante: 1984, V for Vendetta, Las Montañas Blancas. Las tres caracterizadas por gobiernos totalitarios que vigilan a la población mediante telepantallas y/o dispositivos en el cuerpo (eso sí, hay que reconocer que el pionero de todo fue Orwell, autor de 1984). En los tres casos se dan también los despiadados métodos de control que acaban desencadenando la rebelión.

Katniss al presentarse como "tributo" en lugar de Prim.

En The Hunger Games también sucede: tenemos el totalitarismo de Panem con sus medidas sanguinarias. Se toca el tema de la pobreza y se muestra cómo la población, exceptuando a quienes viven en el Capitolio, se las ingenia para sobrevivir al hambre (cazando, recolectando, pescando, etc.). Los “juegos” son para ellos un castigo vil, que les provoca el terror a una muerte brutal (o la de sus hijos), pero que a la vez juega con sus esperanzas, ya que el único vencedor es premiado con la fama y la fortuna, no sólo para él, sino también para su distrito. De esta forma, jugando con sus emociones, el gobierno de Panem consigue mantener el yugo. A pesar de eso, existen almas rebeldes como Katniss y Peeta, quienes, con bastante ingenio, logran burlar las reglas de la masacre. La emoción que provocan en la población, entremezclada con el sentimiento trágico de las pérdidas (en especial la de los participantes de menor edad), hace estallar el germen de la rebelión –eje de las secuelas-.


Ahora, si bien el esquema es más o menos el mismo que nos presentan otras distopías, The Hunger Games destaca, tanto por el carisma de sus personajes (la noble y testaruda Katniss, el astuto Peeta, la traviesa Rue, el rudo pero solidario Haymitch), como por añadir críticas más actuales al asunto: a la televisión basura, a la exacerbación y espectacularización de la violencia, a la publicidad, al consumismo. Los tributos no son vistos como personas, son vistos como productos. Lo que importa para ganar es, sobre todo, gustar al público. No importa lo que hagas, sólo tienes que esforzarte en gustar, en ser el centro de los aplausos.

Presentación de los "tributos" por televisión.

Personalmente, lo que más me gustó fueron estos dos elementos (personajes y nuevas críticas), sumados al manejo visual del filme. Con ello me refiero al uso y significado del color y la forma, sobre todo en el vestuario y la apariencia general de los caracteres: la estridencia en los rostros, cabellos y ropa en la gente del Capitolio, su moda estrafalaria, el uso exagerado de los tonos encendidos y fosforecentes creando una atmósfera grosera. El capitolio es el espacio donde conviven la riqueza y la degradación, la deshumanización. A diferencia de los tributos (y los oprimidos en general), que cuentan con una personalidad propia y estilo sobrio, uno no necesita analizar a las gentes del Capitolio; basta con verles.

La moda a"kistch" del Capitolio

 Para finalizar, me gustaría recordar a los seguidores de esta saga, que la parte 2, titulada The Hunger Games: Catching Fire (Los Juegosdel Hambre: En Llamas) se estrena mundialmente el 22 de Noviembre de este año. Esta vez el director no será Gary Ross sino Francis Lawrence (Constantine, Soy Leyenda, Agua para Elefantes), pero contará con el mismo reparto de actores principales: Jennifer Lawrence (Katniss Everdeen), Josh Hutcherson (Peeta Mellark), Woody Harrelson (Haymitch Abernathy) y Liam Hemsworth (Gale), a quienes se sumará Philip Seymour Hoffman como Plutarch Heavensbee.

Póster de The Hunger Games: Catching Fire

Trailer de The Hunger Games

3 comentarios: